Cuando Alejandra Rubio recibió la feliz noticia de que estaba embarazada de Carlo Costanzia , tuvo que imaginar que le esperaba su año más complicado y a la vez más dulce. Antes de llegar al 2025, la hija de Terelu Campos ya habrá dado a luz y sus planes de ocio se verán condicionados por la atención que requiere el nuevo miembro de la familia . Por ello y durante este verano, Rubio disfruta con su novio de todo el tiempo que tienen disponible en las que son las primeras vacaciones de la pareja. Lejos del foco mediático que les persigue desde el anuncio del embarazo y que, incluso les descubre visitando juntos al ginecólogo, los padres del futuro niño encuentran la calma que necesitan entre Madrid, Mallorca y Málaga. Es en este destino donde ambos se han escapado recientemente para descansar rodeados de sol y playa. Aunque la discreción ha caracterizado sus viajes, la nueva faceta de Alejandra Rubio como 'influencer' le obliga a compartir con sus seguidores fotografías de su viaje. Entre las fotografías en las que ella presume de barriguita en la piscina, ha publicado una en la que aparece agarrando la mano de Carlo mientras se complacen con una comida. El embarazo sigue su curso y es habitual que las embarazadas disfruten de placeres gastronómicos de los que se encaprichan hasta que satisfacen su deseo, y Alejandra Rubio también los experimenta. El pasado miércoles, el periodista Kike Calleja, colaborador habitual del programa 'Vamos a ver', aprovechó los minutos en pantalla para desvelar a sus compañeros de mesa que había hablado con Alejandra Rubio sobre el embarazo y ella le resolvió con confianza todas sus dudas. En su quinto mes de gestación, la futura madre se encuentra «tranquila y contenta» con el embarazo. Y no solo eso. Si las Campos alimentan sus ingresos a golpe de exclusivas, Alejandra también tiene muy presente la alimentación con los comunes antojos de embarazada. Si en sus fotografías en Málaga mostró el enorme plato de boquerones fritos y frituras con limón que se comió en un restaurante, también le apetecen otras cosas contra las que no puede luchar. «Dice que le apetecen mucho las hamburguesas y el caldo de las aceitunas», aseguró Calleja en el programa. Hace un mes, Terelu contaba que en ese momento Alejandra no sufría «antojitos pero sí malestar», y, al parecer se equivocaba. La evolución favorable del embarazo ha dado sus frutos y los antojos ya son comunes en la vida diaria de la televisiva. Alejandra Rubio ya desveló en su exclusiva para la revista 'Hola' que tenía otro mucho más típico entre las gestantes, el de comer chocolate. Alejandra y Carlo se encuentran en pleno renacer profesional . Desde que terminase sus emisiones el programa 'Así es la vida', donde colaboraba ella, se ha volcado de lleno en su faceta como 'influencer' y ya es habitual verla publicando contenido. Por su parte, el padre del niño ha vuelto a trabajar en una de sus profesiones. Si bien como actor no tiene nuevos proyectos a la vista, está muy próximo el lanzamiento de una nueva canción que no ha pasado desapercibida por sus indirectos versos.
