Fuerza, volumen físico y explosividad para el juego interior. Todo eso y más es lo que busca el Betis Baloncesto con Jonathan Kasibabu , cuyo fichaje, oficial este martes, estaba ya muy avanzado a finales de julio, tal como informó Al Final de la Palmera . Firma el cuatro africano hasta 2026. Se trata de un jugador con experiencia en la G-League, Francia, la ACB y, por supuesto, la LEB Oro (ahora Primera FEB) tras su etapa exitosa en el Zunder Palencia, con el que logró el ascenso a la Liga Endesa, y el San Pablo Burgos, del que fue pilar la pasada campaña. Nacido en Kinsasa, República del Congo , pero formado baloncestísticamente entre España y Estados Unidos, este interior de 28 años (cosecha del 96) y 2,03 metros es un ala-pívot que también, por fortaleza más que por altura, puede jugar en la posición de pívot, cerrando el tablero. Un jugador de este tipo, que aporte intensidad y energía sin ser precisamente un virtuoso en el tiro, no lo tuvo el Betis la pasada temporada. El más cercano en perfil quizá fue Ismael Romero, de decepcionante rendimiento en Sevilla. Kasibabu está ampliamente testado en Primera FEB tras sus más de 60 partidos, 64 para ser exactos, jugados entre el Palencia y el San Pablo Burgos. Con los palentinos promedió 7 puntos, 5 rebotes y un tapón en 19 minutos de juego con un 37% por ciento en el tiro exterior. Y esta última campaña, en Burgos , dejó una tarjeta de 4,3 puntos y 4 rebotes en 16 minutos con un 33% de eficacia en el triple. No es un jugador con buena mano en el 4,60. En España no ha alcanzado el 65% y su tope desde el tiro libre fue el 70,5 de su último año universitario, con Fairfield Stags. Hasta allí se marchó tras empezar en Canterbury (Gran Canaria) y pasar por la cantera del Real Madrid. Finalizado su ciclo en la universidad estadounidense, y tras no ser drafteado, se incorporó a la Liga de Desarrollo (G-League), jugando para Long Island Nets y Austin Spurs . Entonces cruzó definitivamente el charco para competir en la Segunda división francesa (Nantes) antes de sumarse al proyecto del Río Breogán en ACB, donde sólo había jugado cinco partidos cuando recibió la llamada del Zunder Palencia para suplir al lesionado Chema González. Es un interior más defensivo que ofensivo que puede anotar mediante balones doblados o buscándose la vida al poste, con bandejas y mates. Es probable que juegue muchos minutos de cinco. Quienes lo conocen bien hablan de un tipo implicado, con compromiso, que hace vestuario. De hecho, de Kasibabu destaca el club en la nota de presa emitida que es «conocido no solo por sus habilidades técnicas, sino también por su ética de trabajo y su dedicación al deporte. Es un modelo a seguir para los jóvenes atletas, su historia es un testimonio de que, con esfuerzo y determinación, los sueños pueden hacerse realidad.
