El verano está asociado al terraceo y al poder disfrutar de tomar algo entre amigos o familias. Si entre los más pequeños es imposible pensar en un julio y agosto sin helados de por medio, los adultos no pueden dejar de relacionar las vacaciones al relax de beberse una refrescante caña , tinto de verano pero también un granizado o una horchata para combatir el calor. Sin embargo, esta no es la única bebida típica veraniega, y es que muchos suelen recordar sus veranos de juventud por las noches de fiesta entre amigos, unos planes en los que solía haber calimocho de por medio. Esta bebida consiste en una mezcla de vino tinto y refresco de cola que se sirve muy frío, a veces con cubitos de hielo de por medio para conseguir la temperatura perfecta. De esa etapa seguramente que se acuerda Marta Bustos, la joven catalana que en 2020, mientras vivía en Estados Unidos, se hizo viral tras perder sus ojos durante un grave accidente casero mientras elaboraba jabón. Cuatro años después ha recuperado la visión de uno de sus ojos y vive felizmente en Barcelona y ahora acaba de mostrar en su TikTok (@stuntmanmarta_) como su pareja degusta calimocho. Esta fue su valoración. « No me puedo creer que en casi cuatro años que hace que vivimos en España David no haya probado el calimocho, pero más vale tarde que nunca», incide ella en la descripción del vídeo, en el que añade que ella también lo catará tras «chorrocientos años» sin beberlo. El vídeo, que en dos días ha superado el 1,3 millones de visualizaciones, empieza con Marta explicando que «David va a probar por primera vez el calimocho». Ambos están comiendo en una terraza y él aparece en primer plano, botella de tinto en mano, que empieza a servir en un vaso. Él continúa y pone « dos piedras », dice irónicamente en relación a dos cubitos de hielo. Marta, entre risas, se refiere a ellos y comenta que «de adolescentes no teníamos esos lujos». David continúa su elaboración con una lata de Coca-Cola mientras ella sigue con la broma y hace sonidos y gestos de arcadas, que argumenta porque « antes lo podía tolerar porque no me gustaba ni el vino ni la Coca-Cola, pero es que ahora me gusta el vino» y no entiende tal mezcla. Mientras, su pareja norteamericana cata la mezcla y su valoración le genera mucha expectación a ella. « No está mal pero creo que prefiero vino solo y Coca-Cola sola», confiesa él mientras ella se ríe. Acto seguido, Marta lo prueba y remarca que a ella le da «asco» porque «odio» este refresco. La cuestión ha generado muchos comentarios y algunos le han recomendado probarlo con limonada o refresco de naranja o añadir una rodaja de limón, mientras que otros han piropeado la bebida. «Es un manjar desvalorado», ha remarcado un usuario.