A escasos días de terminar el mes de julio, no puede decirse al cien por cien que haya sido el mejor en la vida de Alejandra Rubio . Aunque ya ha cumplido cinco meses de embarazo y presume públicamente de tripita, profesionalmente ha sufrido un importante varapalo . El programa de Telecinco 'Así es la vida' ponía fin a sus emisiones el pasado viernes tras más de un año en antena. La hija de Terelu Campos se despedía, al igual que su tía Carmen Borrego , del formato en el que trabajaba como colaboradora con un mensaje de agradecimiento para sus jefas y compañeros en redes sociales. «Gracias por este año. He aprendido demasiado con todos vosotros», escribía en su cuenta personal acompañando las palabras con un vídeo que recopilaba algunos momentos del programa. Tras quedarse sin trabajo, son muchas las dudas que existen acerca de los futuros planes profesionales y personales de Rubio , que pasarán por buscar ingresos en otros sectores. Tal y como ha asegurado en el pódcast 'La casa de mi vecina', conducido por Nagore Robles y Germán González , su carrera televisiva tendrá un parón y ahora le toca abrirse camino en las redes sociales. «Voy a ver si camino más hacia las redes y menos al corazón y a la tele», ha afirmado Alejandra Rubio dejando muy claras sus intenciones de desligarse de la pequeña pantalla y de la prensa. Aunque actualmente cuenta con 321 mil seguidores en 'Instagram', los 'followers' no son el único requisito para que Alejandra Rubio pueda sacar rentabilidad económica. Ella misma se ha dado cuenta que necesita «ponerse las pilas» para ser una buena 'influencer'. «Soy influmierder», se ha considerado bromeando. Su problema no es complicado de advertir, pues solo es necesario echar un vistazo a su cuenta personal. La joven no publica tanto contenido diario como lo hacen otras creadoras de contenido. Por ello, ha comenzado a compartir con sus seguidores algunas fotografías inéditas que, inevitablemente, han provocado que siga protagonizando titulares. Centrada en consolidar su relación con el futuro padre de su bebé, Carlo Costanzia, Alejandra recurría hace unos días a una plantilla de las historias de 'Instagram' para hacer un resumen en seis instantáneas de lo que ha sido su mes de julio. En una de ellas se puede ver algo poco habitual en la vida pública de la pareja: él le da un beso en la mejilla a ella, un hecho que confirma los planes de Rubio de apostar por cambiar su contenido en redes. Alejandra también ha decidido compartir varias fotos embarazada. Lo que sí tiene claro Alejandra Rubio en su nuevo camino profesional es que privará a sus seguidores de conocer algo muy importante en su vida, a su bebé. De cara a la exposición mediática que se espera que tenga después de su nacimiento, ella ha dejado claro que no le va a exponer. «Voy a intentar proteger a mi hijo o hija de todo», ha sostenido refiriéndose tanto a las cámaras como a las redes sociales, aunque no niega que pueda aparecer de espaldas como así lo han hecho otros creadores de contenido con sus hijos.
