Si Federico X de Dinamarca y Mary Donaldson necesitaban un espacio universal para mostrar al mundo el final de sus conocidas desavenencias, nada mejor que el escaparate de los Juegos Olímpicos de París . Hasta allí se desplazaron para disfrutar de los actos previos y la ceremonia inaugural, mostrándose más unidos y extrovertidos que nunca . Muy atrás parecen quedar aquellos momentos de zozobra que el matrimonio vivió no hace tanto y que tuvo su epicentro con aquellas controvertidas imágenes de Federico de Dinamarca paseando con Genoveva Casanova por Madrid. Aquellas fotografías que provocaron un enorme escándalo y una tensión matrimonial sin precedentes. Aquella tampoco era la primera crisis que afrontaba el matrimonio, ya que desde que saliera a la luz la relación entre Federico y Mary Donaldson , los rumores de tensiones y posibles infidelidades siempre les persiguieron. Pero luego llegó la coronación y después un crucero por el norte de Europa que parecen haber enterrado aquellos cismas. Federico X de Dinamarca y Mary Donaldson aterrizaron en París para asistir a los actos previos y posterior ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos. Millones de espectadores estuvieron pendientes de cada detalle y uno de ellos fue ver cómo se comportaban los reyes de Dinamarca. Los fans de la realeza no se han visto para nada defraudados y el matrimonio ha participado en varias citas públicas en las que se les ha podido ver relajados y más unidos que nunca, compartiendo miradas cómplices, riendo y disfrutando juntos de cada momento. Aprovechando su viaje por la cita olímpica, los reyes de Dinamarca acudieron a los Campos Elíseos para inaugurar un pabellón destinado al arte danés en la capital francesa: la Maison du Danemark . Será un lugar que albergará numerosos eventos y actividades destinados a promover la cultura y los conocimientos del país en Francia, estrechando los lazos de unión entre los dos países. Federico X y Mary Donaldson fueron los encargados de cortar la cinta inaugural con una perenne sonrisa en los labios y se dieron un auténtico baño de masas, desbordando amabilidad y simpatía. Se esforzaron en transmitir que su relación no solo ha mejorado tras la catarsis, sino que se encuentra en un excelente momento después de la grave crisis sufrida antes de ser coronados como reyes. Vestida con un mono rojo de pantalón ancho, Mary Donaldson se mostró de excelente humor llenando de sonrisas la sede y compartiendo impresiones con su marido, siempre a su lado y de excelente talante. Luego asistieron a la cena de gala inaugural celebrada en el Museo del Louvre, donde coincidieron con los reyes Felipe VI y Letizia . El primer encuentro de ambas parejas reales desde la gran polémica con Genoveva Casanova. También se reunieron con el resto de las monarquías europeas en el almuerzo del viernes, donde volvieron a coincidir con los monarcas españoles. Y, por supuesto, finalmente admiraron la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos y desde su palco saludaron entusiasmados el paso de la comitiva de los deportistas daneses que participarán en el evento durante el desfile realizado, esta vez en barco, a lo largo del río Sena.