Trece grandes reptiles antediluvianos reciben con las mandíbulas abiertas al visitante en 'Dinosaurios de la Patagonia' , la nueva exposición de Caixaforum Madrid (Paseo del Prado, 36) inaugurada hace unos días que propone un recorrido por el trabajo de los paleontólogos para descubrir cómo funciona la ciencia y cómo ésta reconstruye el pasado, al tiempo que nos presenta las réplicas de los esqueletos de los dinosaurios más importantes hallados en este vasto e indómito territorio de Suramérica, que a comienzos de la era mesozoica estaba pegado a África y bañado por el Pacífico al oeste. El paso de los siglos y la evolución planetaria convirtieron la tierra boscosa, selvática y pantanosa en la que vivieron los dinosaurios en un lugar árido donde, en las últimas décadas, se han hallado los restos mejor conservados del hemisferio sur. La muestra, desarrollada por el Museo Paleontológico Egidio Feruglio (MEF), repasa la evolución y la enorme diversidad de los dinosaurios en una de las regiones más ricas en restos paleontológicos de estos fascinantes animales, con una estrella protagonista: el Patagotitan mayorum, el mayor animal de la época en aquella región y uno de los descubrimientos más importantes de este siglo en la Patagonia. Los restos de este titanosaurio saurópodo, que se exhibe en la plaza pública de CaixaForum Madrid a la vista de todos los ciudadanos, fueron encontrados hace 12 años en la provincia de Chubut (Argentina) y permitieron profundizar en el gigantismo de algunas especies de dinosaurios. Fue en 2012 cuando el agricultor Aurelio Fernández descubrió un primer hueso de dinosaurio en la finca donde trabajaba, en la provincia de Chubut, que forma parte de la Patagonia argentina. Tras años de trabajo, un equipo del MEF encabezado por José Luis Carballido y Diego Pol desenterró más de 200 fósiles de 7 ejemplares de lo que acabó denominándose 'Patagotitan mayorum' (titán de la Patagonia de la familia Mayo, por el apellido de los dueños de la finca donde fue hallado), un coloso que medía 38 metros de largo y 5 metros de altura hasta la escápula, y cuyo peso en vida se estimó en 77 toneladas, el equivalente a 14 elefantes africanos. Además de este gigante, la exposición muestra más réplicas de ejemplares pertenecientes a los tres periodos de la era mesozoica (Triásico, Jurásico y Cretácico) a escala real, como otro de los dinosaurios más grandes ('Tyrannotitan chubutensis'); el más pequeño, de apenas 75 centímetros ('Manidens condorensis'), y dos de los más antiguos, que vivieron hace 230 millones de años ('Eoraptor lunensis' y 'Herrerasaurus ischigualastensis'). La exhibición combina los impresionantes modelos con fósiles reales. Entre otros, se muestran dos fémures, un húmero, un cúbito y un radio del 'Patagotitan'. Estos son holotipos, es decir, ejemplares originales a partir de los que se determinó la descripción de esta especie de dinosaurio. Los visitantes también podrán conocer a través de audiovisuales el entorno donde se encontraron los restos del 'Patagotitan' y cómo fue su excavación, que se alargó durante tres años y requirió dos más de un trabajo de laboratorio que implicó a un equipo de más de 100 profesionales de diferentes disciplinas. Entre los fósiles reales que se podrán observar de cerca se encuentran también unas vértebras de un ornitópodo; dientes de saurópodos como el Bagualia alba o de terópodos de la familia de los carcarodontosaurios, los dinosaurios con dientes de crecimiento constante, como los tiburones, además de numerosos fósiles de flora local.