Las diputaciones provinciales de Castilla y León coinciden en el problema de la vivienda como uno de los retos más urgentes en materia demográfica. Así lo trasladaron ayer la portavoz de la institución burgalesa, Inmaculada Sierra y la diputada de Reto Demográfico, Susana Díez durante la presentación de las conclusiones recogidas tras la primera jornada de trabajo de las diputaciones sobre sostenibilidad demográfica, que se celebró en Burgos a finales de mayo. «El problema básico es la vivienda. Si nos queremos implantar en un pueblo, lo que tenemos que tener es la posibilidad de quedarnos allí o en los alrededores», indicó Sierra. Al respecto, Díez indicó que hay «mucha gente» que quiere ir a vivir a los pueblos, y lo acreditan iniciativas como el Proyecto Arraigo, que tiene unas 200 familias que quieren venir a la Comunidad . «Quieren comprobar cómo es la vida en un pueblo y no se les encuentra vivienda», señaló la también encargada de dirigir la reunión, informa Ical. En relación a los motivos a los que se debe esta situación, Díaz hizo referencia a los pisos vacíos que hay en los municipios y que no están puestas en el mercado del alquiler, y también al «miedo» de los propietarios. A esto se suman las viviendas que se utilizan solo los fines de semana o la falta de motivación de los dueños. El transporte rural y la conectividad fueron temas también a tratar durante este encuentro de diputaciones provinciales. Se puso así de manifiesto la importancia de contar con un mayor acceso a la movilidad que permitirían un mayor acceso a la educación y la sanidad, así como la necesidad de contar con mejores carreteras y servicios de transporte público. Al respecto, Sierra indicó que se están barajando muchas ideas, como hacer más largos los trayectos interurbanos para «acercarse a localidades urbanas», o incluso están en contacto con grupos de acción local para la creación de plataformas de coches compartidos. Entre los objetivos clave para una mejora de la sostenibilidad demográfica se habló también de una mayor financiación para colegios rurales y sanidad, que permitan incrementar su calidad y accesibilidad, así como una mejora de la infraestructura educativa y sanitaria que permitirá ofrecer «condiciones de vida más atractivas». Programas que faciliten el relevo generacional y medidas que apoyen a los jóvenes emprendedores también se destacaron en este encuentro, así como una mayor implementación de energías renovables y la creación de comunidades energéticas, el establecimiento de beneficios fiscales y subvenciones, y la puesta en valor de la vida rural y sus ventajas. En su intervención, Sierra se refirió también al impulso de la colaboración interprovincial, a través de la asistencia a congresos y jornadas dentro de la Comunidad Autónoma. Con respecto a la promoción de la vida rural, Sierra destacó la importancia de promover una «imagen positiva» de los pueblos, como lugares «atractivos» para vivir y trabajar. Para ello, destacó la necesidad de «mejorar» la información que se da a la ciudadanía, de forma que estén al tanto de las iniciativas y oportunidades disponibles, comunicando las «ventajas» que aporta el vivir en el entorno natural. La I Jornada de Trabajo «levantó una gran expectación», tal y como destacó la diputada, que confirmó que este evento contó con 49 participantes, entre ellos ocho de ayuntamientos de la Comunidad, 24 de las nueve diputaciones, seis de la Junta de Castilla y León y once de diferentes asociaciones.
