Del grado de fortaleza financiera, a la capacidad para sostener un rápido crecimiento, pasando por el valor de la riqueza que se genera de cara a la sociedad, el Informe Ardán que realiza cada año Zona Franca de Vigo recoge que 1.289 firmas gallegas logran, por lo menos, uno de sus indicadores de excelencia empresarial; en cabeza, el mayorista de repuestos y accesorios para vehículos Roeirasa, con seis distintivos. En total, el estudio analiza los datos de 42.000 compañías de Galicia que, en su conjunto, generaron en 2022 unos ingresos de 137.000 millones de euros, un 9,4% más que un año antes. Así lo explicó este martes, durante un acto de presentación del informe, el delegado del Estado en la Zona Franca de Vigo, David Regades. Celebró que casi 1.300 compañías gallegas –el 3,5% del total analizado– superen los «restrictivos criterios» para obtener alguno de los 10 indicadores Ardán. Como se adelantaba, la viguesa Roeirasa es la única que alcanza 6 indicadores: generador de riqueza, alta productividad, fortaleza financiera, igualdad de género, empresa circular y gestión de talento. Otras seis firmas gallegas consiguen entre 4 y 5 galardones en esta edición. Son indicadores de prestigio para las empresas que los logran, pero también para el tejido en el que desarrollan sus actividades. Según abundó Regades, las 42.000 empresas analizadas obtuvieron unos beneficios de 1.175 millones de euros y aportaron 235 millones a través de impuestos. Igualmente, entre todas ellas generaron 32.135 millones de euros de valor añadido bruto, aportando al PIB gallego el 46% del total. Más datos a destacar: la creación neta de puestos de trabajo fue de un 6,28%. Comparando el escenario actual con el de 2019, en un marco previo a la pandemia, por cada cinco puestos de trabajo existentes en la actualidad hay uno más que entonces. También hay mejora, respecto a un año antes, en la rentabilidad económica y financiera de las empresas –con registros del 3,99% y 7,6%, respectivamente–, así como en el margen de explotación y en la rotación de los activos y existencias. Entre los expertos presentes en la presentación estuvo el catedrático Xosé Henrique Vázquez, que destacó el afán por la innovación que exhiben las empresas gallegas hoy en día. Un compromiso que, concedió, cada vez resulta estar más presente en sus hojas de ruta de cara a asegurarse su crecimiento y su futura competitividad global. Según recoge el documento, el 67% de las empresas invirtió en la implementación de «mejoras significativas» en sus procesos internos, mejorando capacidad y flexibilidad en la producción. Por su parte, el también catedrático Santiago Lago se refirió a una comparativa con el plano estatal en términos de productividad, en la que la comunidad gallega «no sale mal parada», reflejando una dinámica «más favorable» que la media española. Pero en lo que todavía queda trabajo por hacer, tal y como quedó expuesto el martes, es en materia de igualdad de género. Ese fue uno de los puntos en torno a los que orbitó la rueda de prensa, en la que la catedrática Belén Fernández-Feijóo reivindicó que los desequilibrios en las estructuras salariales de hombres y mujeres, su monetización y, en general, su grado de igualdad en el entorno de trabajo, «aún no han alcanzado niveles aceptables». Igualmente, el informe concluye que «casi 3 de cada 4 empresas tienen por delante un amplio recorrido de mejora en el ámbito de la economía circular»; un bache importante es que la quinta parte de las empresas que realizan un esfuerzo hacia la circularidad se encuentran todavía en un estadio temprano. Mejores datos los hay en cuanto al ecodiseño de productos –la reducción de su impacto ambiental durante su ciclo de vida–, un campo en el que el estudio da cuenta de «avances positivos». Entre las empresas que ecodiseñan más de un cuarto de las mercancías que venden, su oferta de productos se incrementó un 60% en 2023.
