«O se aumentan recursos, o se intenta conseguir que el número de asuntos que entra disminuya y las partes alcancen acuerdos antes de llegar al juzgado». Es la propuesta del presidente de la Audiencia de Barcelona , Antonio Recio , para tratar de evitar el colapso de las secciones civiles , dada la falta de presupuesto que alega el Ministerio de Justicia para asumir el refuerzo con más magistrados. La entrada de asuntos durante los últimos doce meses ha sido «elevadísima». Los principales, demandas que pretenden la nulidad de la cláusula de gastos hipotecarios , tras el fallo del TJUE sobre los plazos de prescripción. También procedimientos de usura, relativos a créditos de tarjetas 'revolving' o por ocupaciones de inmuebles. «Lo que está dando lugar a miles de demandas », ha indicado. La saturación de estas secciones significa que los magistrados tardan cerca de dos años en resolver los recursos de apelación . «Si no se crean más plazas o refuerzos, este plazo se irá incrementando ». Otra de las soluciones que Recio ha propuesto este lunes, durante la presentación de la memoria anual, ha sido que «el legislador reaccione y adopte medidas para limitar la excesiva ligitiosidad de los juzgados de primera instancia», promoviendo la conciliación . Es decir, que los asuntos se resuelvan antes de acudir al trámite judicial. «Los ciudadanos tienen derecho a acudir a la Administración de Justicia, pero el legislador debe favorecer la resolución del procedimiento judicial fuera de ésta, porque ahora carecemos de recursos para ofrecer una respuesta a tiempo », ha subrayado el presidente de la Audiencia de Barcelona. Ejemplo de la efectividad de la propuesta son las conformidades penales, casi un 50 por ciento de los asuntos se resuelven tras un acuerdo entre las partes. No sólo las secciones de éste órgano judicial se ven saturadas, sino también los juzgados de instancia. La tramitación de asuntos se alarga entre año y medio y dos años. «Podemos hablar de tres o cuatro hasta obtener sentencia firme. Es un retraso inasumible y excesivo », ha constatado Recio. Si lo fijado por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) es que cada magistrado debe resolver unos 200 asuntos al año, en el caso de los de la Audiencia de Barcelona la cifra se eleva a unos 400. «Hemos propuesto planes de choque en los tres últimos años, pero el Ministerio de Justicia los ha rechazado por carecer de recursos presupuestarios». Durante la rueda de prensa, el presidente de la Audiencia también ha anunciado que, 14 años después, el proyecto para construir un nuevo edificio para el órgano judicial, ya está presupuestado. Se destinarán 100 millones de euros para construirlo en el solar donde se ubicaban los antiguos juzgados, en el paseo Lluís Companys. La previsión es que el nuevo espacio esté terminado entre 2028 y 2029. Para Recio es una «buena noticia», ya que permitirá « ofrecer una adecuada atención las víctimas , objetivo prioritario de la Justicia».