La presidenta de las Cortes Valencianas , Llanos Massó , ha insistido este lunes en que seguirá en su puesto, el único cargo institucional que mantiene Vox a nivel autonómico tras romper con el PP: «La línea roja para que yo abandone es que mi partido y mi presidente consideraran que es la opción oportuna». «Mi cargo está a disposición de mi presidente y de mi Comité Ejecutivo Nacional», ha aseverado la segunda autoridad de la Comunidad Valenciana , en referencia al líder nacional de Vox, Santiago Abascal. Por tanto, seguirá «trabajando hasta que termine la legislatura». Massó ha vuelto a esgrimir que los mismos votos que eligieron a Carlos Mazón como presidente de la Generalitat, la eligieron a ella. Aunque los populares -con cuarenta diputados- quisieran alinearse con la izquierda, no existe un mecanismo en el Reglamento de Les Corts para apartarla de la Mesa. Por tanto, Vox seguirá dirigiendo la Cámara, pese a que es el partido con menor representación (trece escaños). La formación avanza que hará una «oposición leal, pero contundente» en lo que resta de legislatura y ha rechazado que haya grietas internas en su grupo parlamentario. «No somos kamikazes y no hemos venido a dinamitar nada», ha incidido en una entrevista en 'Les Notícies del Matí' de À Punt. Llanos Massó ha defendido la salida de su partido de los gobiernos autonómicos de coalición con el PP para no ser «cómplices» del «efecto llamada» que, a su juicio, genera la acogida de menores migrantes no acompañados. Una decisión tomada por la dirección nacional de Vox, ante la que «más que voces discordantes, había personas preocupadas» por los proyectos en marcha que no se podrían culminar en las consellerías. En ese sentido, ha señalado que ha hablado con el exvicepresidente de la Generalitat Vicente Barrera y el extitular de Agricultura José Luis Aguirre, pero no con la exconsellera de Justicia e Interior Elisa Núñez , que la semana pasada se daba de baja del partido con críticas a Abascal por la «deriva radical» que había emprendido. Los tres fueron cesados por Mazón antes de que se oficializara el 'divorcio' con los de Abascal. Al respecto, Massó ha apuntado que Núñez conocía el ideario de Vox, «que no ha cambiado desde 2014», cuando entró a formar parte del Gobierno regional. «Es un poco extraño que estuviera en un pleno de Les Corts defendiendo el programa y quince días después descubra que se ha radicalizado», ha sostenido. Sobre el primer choque controlado con los populares, ya en la oposición, a cuenta de la exigencia de que se tramite el decreto de simplificación administrativa -uno de los planes estrella de Mazón- como proyecto de ley, Massó ha explicado que solo buscan «introducir mejoras» en el mismo texto que aprobaron estando todavía en el Consell. «No hay nada más oculto, ni extraño», ha agregado. En cuanto a las declaraciones en redes sociales en las que calificaba de «imbéciles millonarios elitistas» a los futbolistas franceses que celebraron la derrota de Le Pen, Massó ha defendido que «Twitter es muy distinto a un discurso o una entrevista». «Si nos vamos al diccionario, imbécil significa tonto y a mí me parece muy tonto apoyar a un sistema político en Francia que va a hacer aumentar la inseguridad y destrozar las políticas sociales», ha argumentado. Considera «absurdo», además, que lo haga «gente que no tiene que sufrir» esa situación.