El café es una de esas bebidas que consumen la mayoría de personas en el mundo día a día, muchos por gusto, otros por costumbre o por necesidad de los efectos de la cafeína para mantenerse despiertos. Sea para desayunar, para activarte a media mañana o después de comer, existen muchos tipos de café , tanto por la manera en la que están elaborados como por su calidad. La popularidad del café ha hecho que en los últimos años se extienda una 'cultura cafetera' que abre la posibilidad de tomar cafés que aporten verdaderamente beneficios a la salud y no perjuicios, como ocurre con muchos de ellos que se consumen de manera habitual ante el desconocimiento de algunas de sus características dañinas. Entonces ¿el café es bueno o malo para la salud? La respuesta es: depende. Así, a día de hoy existen expertos que pueden indicar qué cafés no nos hacen daño y nos aportan cosas buenas y cuáles debemos evitar a toda costa . A continuación te dejamos la opinión de un divulgador de nutrición que acostumbra a compartir contenido de este tipo. Él es Fran Susín y dice lo siguiente: «Vamos a intentar enseñaros a elegir un buen café. Primero tenemos que entender que el café tiene muchos beneficios, a nivel cardiovascular, a nivel cognitivo, intestinal... Unas tres tazas de café van a evitar que tengas un problema cerebrovascular, y un problema cardíaco...» comienza explicando. También indica que el café puede ayudarte a ir al baño, porque estimula la motilidad intestinal, así como al hígado y al páncreas, además de estimular el sistema central y el sistema nervioso a nivel energético. Ahora bien, ¿qué café elegir , en este caso, cuando lo vamos a comprar en el supermercado? « Evitar siempre en cápsulas ya que tiene metales y plásticos , que son disruptores endocrinos que lo acabamos tomando y afectándonos. Siempre en granos y al natural,nunca torrefacto ni mezcla. Primero, el torrefacto está tostado a altas temperaturas que suelen ser de baja calidad y además le añaden azúcar para que se tueste, y la mezcla es torrefacto más natural y siempre suele tener también azúcar, para que lo diferenciemos entre sus ingredientes». «¿Y por qué en granos y no ya molido? Porque se oxidan sus cualidades y va perdiendo dichas cualidades» explica el experto, mostrando varios tipos de cafés que pueden ser habituales en nuestra cesta de la compra para tomar a diario.