Colombia se impuso este jueves a Uruguay para clasificarse a la final de la Copa América, en la que se verá las caras con Argentina. Sin embargo, la noticia llegó después del pitido final del árbitro y en forma de una vergonzosa pelea , algo más habitual de lo deseado en el fútbol sudamericano. En primer lugar, hubo un pequeño enfrentamiento entre los futbolistas de ambas selecciones en el centro del campo al término del encuentro, que no fue a más. Pero casi al mismo tiempo, se inició una trifulca en la tribuna del estadio Banco de América, en Charlotte. En la zona más cercana a los banquillos y el terreno de juego, camisetas amarillas y celestes se enzarzaron. Hasta el punto de que aparecieron los jugadores de Uruguay y subieron hasta la grada para enfrentarse a los aficionados cafeteros . Darwin Núñez y Giménez fueron dos de los más protagonistas, pero había muchos futbolistas inmersos en la pugna, también el barcelonista Araujo. De hecho, el delantero del Liverpool se llevó un puñetazo por parte de un hincha colombiano en una de las imágenes más virales y vergonzosas que dejó la pelea. El central del Atlético de Madrid ofreció su versión de los hechos y aseguró que los jugadores celestes acudieron en defensa de sus seres queridos ante la avalancha que sufrieron por parte de aficionados cafeteros. «Esto es un desastre. Nuestra familia corrió peligro . Tuvimos que meternos para la tribuna a sacar a nuestros seres queridos, con bebés chiquitos recién nacidos», declaró Giménez. «No había ni un solo policía, cayeron a la media hora (...) Ojalá que los que están organizando esto tengan un poco más de cuidado con las familias», dijo ofuscado. «Todos los partidos está ocurriendo. Nuestras familias están sufriendo por culpa de algunos que se toman dos traguitos que no saben tomar », añadió.
