En el barrio de Los Remedios, en Sevilla, viven estos días algunos vecinos preocupados por los que les ha tocado vivir con la presencia en sus viviendas de personas que querían ocuparlas tras protagonizar todo tipo de engaños. La situación ha ido a más en los últimos días y son varios los grupos de whatsapp que se han creado informando de lo ocurrido. «Esta mañana, dos hombres, presuntamente fontaneros, han entrado en dos bloques del Edificio Presidente para cambiar las cerraduras y ocupar los pisos. Gracias a un vecino que se dio cuenta y llamó a la policía, se ha conseguido pararlos y echarlos«, ha sido uno de los escritos que se han realizado. Otro vecino respondió «estos señores llevaban unas escrituras falsas por si les preguntaban... Sabían las viviendas que estaban vacías por bloque. Al final los han cogido en la calle Asunción, número 74. Es una organización». También a través de distintos sonidos enviados por varios canales se ha comunicado en la vecindad la situación actual: «Un amigo, que tiene un piso en la calle Asunción, me ha dicho que ayer le intentaron entrar de nuevo. Por lo visto, se presentaron varias personas, siendo una de ellas, según dicen, cerrajero. Los otros llegaron con carpetas, como trayendo documentación. Lo que hacen es cambiar la cerradura. Y, si algún vecino pregunta, dicen que son los nuevos propietarios. Ha habido suerte porque la vecina ha dicho que era muy raro. Llamó al propietario, y este le dijo que seguía siendo él el dueño. Llegó en 40 minutos. Es verdad que la cerradura estaba cambiada, pero, como no había nadie dentro, no hubo problemas«. En el mismo sonido se explica lo que ocurrió después con la llegada de los que querían ocupar la casa de manera ilegal: «Estas personas estaban allí, y empezaron a discutir diciendo que ellos eran los nuevos propietarios. Llevaban hasta unas escrituras falsas. El vecino terminó tirando la puerta abajo«. Otra vecina habló de una circunstancia parecida: «Una amiga tiene un piso en la parte que da a la Feria, y, al presentarse en su vivienda, vio a un hombre de nacionalidad española, muy bien vestido , y con unas supuestas escrituras, en las que decía que ese piso era suyo«.
