En el periodo vacacional por excelencia, los meses de verano , las zonas de playa suelen ser el principal destino de quien busca desconectar de la rutina diaria y disfrutar unos días de las maravillas costeras costeras que ofrece Andalucía. La riqueza del litoral gaditano no deja de sorprender al viajero. Cuenta con lugares únicos como Tarifa , muy conocida y popular entre los amantes de los deportes náuticos, o Barbate, con una gran playa. Ambas zonas tienen el denominador común de contar con kilómetros de arena fina y el mar transparente. Sin embargo, hay otra que se caracteriza por tener el agua más cristalina de la provincia, una joya con amaneceres y atardeceres únicos denominada Zahara de los Atunes , un destino que cada vez acoge a un mayor número de turistas. Son más de ocho kilómetros de extensión hasta el cabo de Gracia y pasando por el cabo de la Plata y en la que la playa queda envuelta en un espacio verde que combina con el azul del cielo y del mar. La zona se divide en varias playas y la más popular y numerosa, por el número de urbanizaciones con las que cuenta es Atlanterra . El ambiente familiar predomina en esta zona. Seguidamente se encuentra la playa de los Alemanes, situada entre los cabos de Gracia y de la Plata. Cuenta con un kilómetro y medio de extensión aproximadamente y unos 50 metros de ancho. No suele estar masificada aunque en temporada alta no es fácil aparcar por el poco espacio con el que cuenta para ello. Ambiente tranquilo y oleaje animado caracterizan esta cala. Y más adelante, la playa del Cañuelo o también conocida como de los poetas. Se trata de una de las zonas más vírgenes de Zahara de los Atunes, un tesoro más escondido y hasta donde cuesta acceder por estar rodeada de naturaleza. Es una cala tranquila y donde el ruido de las olas se convierte en el hilo sonoro ambiental de la jornada playera. Que Zahara tenga este tipo de aguas es un atractivo más para quienes practican buceo y les gusta disfrutar de las maravillas que hay bajo el mar. Así, esta actividad cada vez goza de más adeptos en la zona, que terminan su momento deportivo y permanecen disfrutando bajo el sol de la arena dorada y limpias aguas saladas.