Lo peor de Biden y Trump es que Nixon era mejor. Mucho mejor que ellos. Y no sólo por eso que dijo Renata Adler, que siguió en primera fila el Watergate trabajando en la comisión del Congreso: «No se probó nada en absoluto contra Nixon. Las transcripciones de las cintas no se corresponden con lo que se escucha directamente en ellas… Se trata de 'cassettes' regrabados donde se superponen varias capas de audio para conseguir que se desprendan ciertas cosas. Fue el triunfo de una campaña de desprestigio… No cometió traición ni sobornó a nadie. Me sentí fatal, culpable, y tuve que escribirlo». Cuando ves viejas entrevistas a Nixon (más allá de las de Frost), lo escuchas decir que durante...
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