El ministro de Transportes y Movilidad Sostenible y exalcalde de Valladolid, Óscar Puente, ha querido echar un capote al movimiento leonesista traducido este miércoles en la aprobación en la Diputación de una moción en favor de una autonomía propia para las provincias de León, Zamora y Salamanca asegurando que «entiende y respeta» la iniciativa que contó con el rechazo de PP y Vox . En los micrófonos de Onda Cero ha reconocido ser la «bestia negra» de este movimiento que busca la ruptura de Castilla y León precisamente por haber sido regidor en la ciudad del Pisuerga y haber protagonizado varios enfrentamientos con León, incluido con el alcalde de la capital, José Antonio Diez (PSOE), uno de los más firmes defensores de esta iniciativa leonesista y con el que mantiene a día de hoy agrias disputas. En todo caso, y en parte por la 'pelea' que el ministro también protagoniza con la Junta de Castilla y León, ha afirmado que «León es una tierra que necesita mucha ayuda y soy de los que sostiene que es probablemente la provincia que tiene la crisis estructural más importante. Allí ha caído la población a plomo y ha perdido mucha actividad. La historia le ayudó mucho, por ejemplo, con la minería, pero no ha encontrado recursos alternativos para hacer frente a esas crisis. Por lo tanto, León es una tierra que merece una especial atención», ha aseverado inicialmente el ministro. En cuanto a si la posición del PSOE en el debate de esa moción es asimilable a la de la dirección nacional del partido, Puente ha admitido que no era el más adecuado para responder a esa pregunta para luego afirmar que «es la posición del PSOE de León». Eso sí, en su habitual crítica a la Comunidad de Castilla y León, a la que llegó a definir como «geriátrico a cielo abierto», ha señalado que esta autonomía «nunca ha cuajado como tal. No hay una identidad castellana y leonesa en la ciudadanía y los leoneses nunca han aceptado ni asumido su pertenencia a esa comunidad», ha agregado el ministro. En esta línea, se ha referido además al Día de la Comunidad que se celebra el 23 de abril. «Somos la única que tiene una fiesta y no la celebramos juntos. El PSOE de León propuso otra fiesta y que todos fuéramos a las dos y dije que no me parecía mala idea. Algunos se enfadaron conmigo pese a que sólo quería buscar fórmulas de encaje, de que se sientan más a gusto, pero la verdad es que eso no se produce y ahora están defendiendo esto. Yo lo respeto», ha explicado el ministro.
