La experiencia de alojarse en un hotel puede ser una aventura impredecible. En ese sentido, una popular tiktoker, conocida como 'Nosoyloqueves', publicó un video en el que criticó duramente la habitación 'accesible' que le asignaron en un hotel . En su publicación, no solo denunció las deficiencias en la accesibilidad de la habitación, sino también el elevado precio que tuvo que pagar por ella. En el vídeo, que acumula más de 1,2 millones de reproducciones, la creadora de contenido reveló: «Estoy alucinando, ¿cómo pueden vender esto? ¿700 euros y me decís que esta es vuestra habitación accesible? Que no me voy a poder bañar en dos días...». Poco después la influencer mostró la habitación de hotel en la que se alojaba para demostrar su 'accesibilidad'. «724 euros hemos pagado por dos noches y no me voy a poder duchar porque la habitación que es 'accesible' resulta que es accesible en el 1900. Esta es la ducha y mirar el escalón que tiene para bajar, esto no es una ducha accesible señores». Sin embargo, no es el único impedimento que encontró en la habitación de hotel. «Bueno y ni que decir tiene que el váter... ¿aquí dónde hace una persona una transferencia?», se preguntaba mientras mostraba el váter de la habitación. «¿Cómo te lavas las manos aquí?», confesó visiblemente molesta. «Vosotros sabéis perfectamente que yo suelo bromear mucho con estas cosas y al final el factor sorpresa entra dentro de viajar con discapacidades, pero no me puedo creer yo que haya pagado por una habitación que me han vendido en Meliá como accesible y no lo es. No sé si a Meliá esto le parece una tontería, pero poderte asear, ir al váter... es lo básico. Me he quedado polo norte», manifestó. Tras la experiencia, la influencer fue a recepción para hablar con un responsable . «Me asignaron una habitación accesible que no es accesible», comentó. «A ver son las que tenemos accesibles, no es adaptada es accesible», contestó la recepcionista. «Bueno yo trabajo como consultora de accesibilidad y eso ni es adaptado ni es accesible, así que si pudiese hablar con alguien frente a este tema...», respondió la creadora de contenido. «Nos han dado para ver otra habitación », confesó la creadora de contenido mientras mostraba la nueva estancia. «La puerta estrecha, es que se están riendo de nosotros. Por aquí entra mi silla porque es muy estrecha... ¿Y aquí cómo me baño? Es que ni un banquito de cortesía, nada». Por último, la creadora de contenido manifestó que, tras descartar la nueva habitación, les mandaron a otro hotel «y todo esto a contrarreloj porque tenía una entrevista y tenemos una fiesta y tenemos que estar listos casi que ya y nos encontramos que no tenemos dónde dormir, así es la vida». Sin embargo, esta vez si que encontraron un alojamiento adaptado a las necesidades de la influencer. «Madre mía lloro, o sea es que lloro de la emoción, esto se le parece un poco más a un baño accesible, el váter para transferencia , el grifo perfecto y un banquito de cortesía que deberían tener todos los hoteles», concluyó.