El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha asegurado que asume el rol de erigirse en «el líder de la oposición en Galicia frente al Gobierno central» en el pleno de este miércoles en el Parlamento ante las críticas de un BNG que le instaba a «ganarse su salario». Fue en un intercambio de opiniones acerca del modelo de financiación de la Comunidad, que la líder del Bloque, Ana Pontón, aseguró que deja un agujero de 13.975 millones desde 2009, unos mil millones al año. Pontón reiteró la posición de su partido, de que «Galicia necesita un sistema de financiación propio, singular», «adaptado a nuestra realidad» y que «nos permita tener la llave de nuestro dinero, porque la factura del centralismo que usted defiende no sale muy cara», en relación a . Unas palabras que el presidente consideró «irónicas», al venir de «quien apoyó todas las investiduras de Pedro Sánchez» pese a que aún no han visto cumplido el pacto de investidura. «Son ustedes los grandes timados, lo malo es que a quien se tima es a Galicia» , espetó, lanzando al aire la pregunta de que si se trata de una cuestión «tan importante», por qué no la pelearon ellos cuando negociaron con el actual Gobierno. Con todo, ya adelantó que lo que hará la Xunta para impulsar la financiación de la Comunidad será «lo contrario» a lo que plantean los nacionalistas, huyendo de la «particularidad, del egoísmo y de planteamientos antigallegos», «rechazar una política que para Galicia es letal y demoledora, que ustedes siguen apoyando en Madrid». Recordó que la financiación autonómica no es ni «para hablar de ideologías ni para comprar gobiernos», y que desde Madrid se están «ventilando la igualdad de los territorios en España». «Si nos llaman para repartir las migajas que van a quedar después de ese festín singular que se quieren dar algunos, entonces que no cuenten con Galicia», espetó un Rueda que ahora, al contrario que hace unos meses, cuenta con el referendo de las urnas. Fue entonces, ante las críticas del BNG que lo acusaron de no estar actuando como un presidente y más en calidad de jefe de la oposición a su partido en la Cámara gallega, cuando Rueda, lejos de recibir el comentario como una ofensa, aprovechó la oportunidad. « Sí, yo soy el jefe de la oposición de Galicia frente al Gobierno central y a mucha honra«, dijo, asumiendo en solitario la labor de defender los intereses de la Comunidad, frente a un grupo del que «nadie espera nada más que que le tape las vergüenzas a Pedro Sánchez» otro que es «absolutamente cómplice» del Gobierno central y que fue «timado» en la europeas. [NOTICIA EN ELABORACIÓN]
