«Los homosexuales son personas iguales a todos los demás y no consideramos que nadie tenga que hacer bandera de ninguna condición sexual». Es uno de los argumentos que esgrime Vox para negarse a que se coloque el símbolo del colectivo LGTBI en las Cortes Valencianas porque, a su juicio, atenta contra la «objetividad y neutralidad» de las instituciones públicas. Tanto es así, que amenazan con ir a los tribunales al entender que se «vulnera» la Ley de Banderas -pese a que el texto únicamente se refiere al orden y lugar en el que deben ondear-, el artículo 14 de la Constitución y la jurisprudencia del Tribunal Supremo. De hecho, la bandera del arcoiris nunca se cuelga junto a las oficiales -la española, la Senyera y la europea, situadas en tres mástiles junto a la entrada principal-, sino en la fachada del Palau del Borja, sede del Parlamento autonómico. El grupo parlamentario ha presentado este miércoles un escrito en el que piden que se anule el acuerdo de la Mesa de abril que permitió hacer uso de la misma en el Día contra la LGTBIfobia -el pasado 17 de mayo- y por el que se volverá a colocar con motivo del Día del Orgullo , el próximo 28 de junio, como viene ocurriendo desde 2016 . La resolución salió adelante con el voto en contra de la presidenta de la Cámara, Llanos Massó (Vox); el apoyo del PP y la abstención de PSPV y Compromís. El síndic de Vox, José María Llanos, ha negado que su partido sea «homófobo» -como si ha dejado entrever la oposición- y ha aseverado que l a bandera LGTBI «no representa a todos los homosexuales» . Preguntado por los periodistas sobre si su formación acudirá a los eventos del Orgullo organizados por la Generalitat que gobiernan junto al PP, Llanos ha explicado que no participará «en ningún acto en defensa de ningún colectivo especial» ni defenderá «posturas ideológicas de colectivos partidistas». Sin embargo, los de Santiago Abascal se quedarán solos en sus intenciones, pues el resto de grupos se han posicionado en contra de las mismas. Sin entrar a valorar los argumentos de sus socios, los populares han sentenciado que las acuerdos se cumplen y «la bandera LGTBI se va a colocar en Les Corts». El secretario general del PP y portavoz adjunto de su grupo, Juanfran Pérez Llorca, se ha mostrado convencido de que «no se comete ninguna ilegalidad» por lucir «un emblema para reivindicar de manera simbólica la lucha de un colectivo». Pérez ha insistido en que «la posición del PP es clara y no admite dudas», al tiempo que ha apuntado que en el patio gótico del Palau de la Generalitat ya está el cartel conmemorativo de la campaña 'Orgull de Comunitat', que incluye la bandera LGTBI. Mucho más críticos han sido PSPV y Compromís, que han cargado también contra los populares por mantener en el Ejecutivo autonómico a la «extrema derecha» y convertir la reivindicación de derechos en «pinkwashing». A juicio del portavoz socialista, José Muñoz, Vox «persigue a las personas que pertenecen al colectivo LGTBI, quienes están sufriendo un aumento preocupante de los delitos de odio y de las agresiones , según las estadísticas». En la misma línea, el diputado de Compromís, Francesc Roig, ha sostenido que las palabras de José María Llanos son una «provocación absurda» para conseguir «cuota de pantalla» durante el mes del Orgullo y ha calificado de «aberración» su propuesta.