«Decía Luis García Montero (director del Instituto Cervantes) que resistir es una forma de alegría. Hemos resistido una vez más, hagámoslo con alegría. resistir es convencer y finalmente vencer». Así terminó su intervención este sábado el secretario autonómico del PSOE, Luis Tudanca , en la clausura de la III Escuela de Gobierno del PSCL . Dos días en los que los socialistas se han reunido en el Colegio Arzobispo Fonseca de Salamanca para tratar de coger impulso y armarse para su objetivo final de alcanzar el Gobierno de Castilla y León. Al menos, con esa idea se llegó a un encuentro en el que se ha hablado de comunicación política, reto demográfico, fondos europeos e inteligencia artificial, según el guion establecido. También ha querido ser un evento para reafirmar el liderazgo de Luis Tudanca y poder eliminar cualquier atisbo de duda sobre su candidatura en las próximas elecciones autonómicas de 2026, si se cumple el calendario y no se vuelve a pulsar el botón del adelanto electoral. No ha sido difícil cerrar filas en torno al secretario general del PSCL, más que nada porque en Salamanca estaban sus afines y los críticos, como la Ejecutiva de León con Javier Alfonso Cendón a la cabeza, no apareció. En cualquier caso, lo que Tudanca sí dejó claro es su intención de seguir en la pelea: «Aquí me tenéis hasta la lucha final, para darle a Castilla y León lo que se merece» , fueron sus últimas palabras ya sobre la sintonía socialista que ponía fin al evento. «Una escuela más, una campaña más y un paso menos para que Castilla y León tenga el futuro que se merece», insistió. Minutos antes, fue otro de los invitados a la clausura, el presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón , el que echó una mano al dirigente castellano leonés para reforzar sus intenciones. «Estáis preparados para gobernar. El PSOE de Castilla y León tiene proyecto, visión de comunidad, equipos y liderazgo», señaló el asturiano, que trasladó a Tudanca que «para ser alternativa se tienen que hacer equipos». «Hay liderazgos débiles, que se rodean de gente que no aporta nada para destacar; luego están los liderazgos que se rodean de los mejores y Luis está entre los segundos», argumentó Barbón. Noticia Relacionada estandar No Ana Redondo mantiene que «los periodistas no son amigos, somos su comida» Montse Serrador La ministra de Igualdad apuesta por una legislación «más exigente» en el derecho a la información veraz Para no salirse del ambiente político actual, durante su intervención por videoconferencia, el presidente de Asturias pidió al socialista castellano y leonés que demuestre «que se puede ganar y gobernar sin insultar». «Os invito a hacer política sin crispar», añadió, después de recordar que «el parón del presidente nos llamo a reflexionar sobre cómo la política tóxica está llegando a todas partes». En las diferentes intervenciones también se recordaron continuamente y se justificaron los cinco días de retiro de Sánchez y se habló mucho de Europa, porque el evento sirvió para que la número dos en la candidatura del PSOE al Parlamento Europeo, la vallisoletana Iratxe García . arrancase con su campaña electoral. Así, tuvo un especial protagonismo en las dos jornadas y ya en la última, en 'modo' electoral, prometió trabajar por «la justicia social, la igualdad de género y la sostenibilidad» porque «tenemos mucho más por hacer, más propuestas e ideas y el próximo 9 de junio está en nuestras manos». Otro de los asuntos más repetido durante las dos jornadas fue la proposición de ley de Concordia, con el informe realizado por tres relatores de la ONU y la respuesta que han dado los socios de Gobierno PP y Vox. A ellos se dirigió Luis Tudanca para señalar que «están a dos declaraciones de decir que la ONU es sanchista y terrorista». También se refirió al presidente de la Junta, Alfonso Fernández Mañueco, al que «sólo le queda retirar» la proposición de ley de concordia «y está tardando, porque ya llega un día tarde» por lo que «tiene dos caminos: o echa a Vox del Gobierno o se marcha él». Además, advirtió de que «conseguimos que se retirase el protocolo antiaborto y lo volveremos a hacer; dijimos que pararíamos la ley de la discordia y la vamos a parar». El problema que tienen ahora los socios de Gobierno, según Tudanca, es que «no les decimos lo que son esas leyes los socialistas o las asociaciones de memoria, sino la ONU con un informe demoledor donde dice que se están vulnerando derechos fundamentales». «En las Naciones Unidas, en los relatores, es incomprensible que haya gentes que añoren el franquismo», remató.
