La mirada crítica ha analizado al detalle el comportamiento de Íñigo Errejón tras la denuncia por abuso sexual de la actriz Elisa Mouliaá y Manuela Carmena ha hecho por su parte, las primeras declaraciones ante los micrófonos de televisión. La reciente denuncia de abuso sexual presentada por la actriz Elisa Mouliaá ha llevado a un análisis profundo del comportamiento de Íñigo Errejón. Según el doctor Gaona, este podría haber incurrido en un grave error al manifestar "pensamientos disonantes", donde las palabras y las acciones no se alinean. En situaciones que involucran el sufrimiento humano, es crucial discernir entre la psicopatología y el delito. Gaona aclara que la psicopatía no se considera una enfermedad, y que las adicciones del acusado también juegan un papel importante.
En el caso de que se apliquen adicciones como atenuantes, el médico sostiene que es necesario evaluar la naturaleza de estas. "Hay que investigar si el individuo consume drogas de forma crónica o si el delito ocurrió en una ocasión puntual. También es relevante analizar si se drogó antes de cometer el acto", indica Gaona. Sugiere realizar un análisis de cabello y una psicobiografía para entender el contexto del comportamiento del acusado.
El debate sobre la moralidad del discurso también resalta, especialmente en relación con cuestiones como la infidelidad. Gaona enfatizó la necesidad de centrarse en el tema de los abusos. En un programa de Telecinco, se comentó que ser adicto al sexo podría considerarse una atenuante, aunque se subrayó que deben analizarse muchos otros factores. "La adicción puede manifestarse de diversas formas. Es esencial evaluar esos rasgos, aunque esto no exime de responsabilidad", apuntaron los colaboradores del programa.
Sol Sánchez, por su parte, advierte que los problemas de comportamiento no se solucionan con un simple cursillo. Otro colaborador criticó a Yolanda Díaz, quien designó a Errejón como portavoz sin consultar con el resto de la coalición. La crítica hacia su gestión se intensificó, sugiriendo que debería dimitir por respeto a sus votantes. "Deberían enfrentar las preguntas de los periodistas y explicar su postura. Si SUMAR no logra recomponer su estrategia, el proyecto puede fracasar", añadieron.
La exalcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, también se pronunció sobre este escándalo. "Siento mucha tristeza por las víctimas de maltrato. Este suceso nos obliga a reflexionar sobre la inteligencia emocional", comentó. En su comunicado, Carmena se distanció de Iñigo Errejón, expresando su sorpresa ante los comportamientos denunciados. "Me duele profundamente lo que están viviendo las víctimas y me sorprende que alguien que fue un referente ideológico pueda haber actuado así", afirmó. Manuela Carmena e Íñigo Errejón hace tiempo que estaban distanciados.
Al abordar el silencio en Sumar, Carmena sugirió que el partido debe esclarecer lo sucedido y tomar medidas adecuadas. "Es fundamental que los líderes políticos sean ejemplares. No solo se debe pedir agudeza intelectual, sino también capacidad emocional", concluyó.
Carmena, e Íñigo Errejón no habían tenido contacto desde que dejó la plataforma, expresó que lo conoció poco, pero siempre lo demostró una persona de gran capacidad intelectual y un discurso seductor. La situación actual plantea preguntas importantes sobre la responsabilidad y el comportamiento de quienes ocupan cargos de liderazgo.
