Frank Cuesta ha recibido la visita de varios influencers como Xocas, Plex o Flexcidine en su santuario. El objetivo de estas visitas es recaudar fondos para el proyecto del herpetólogo, basado en la salvación de animales víctimas del comercio ilegal y la explotación con fines económicos.
Después de recibir duras críticas por su posicionamiento en contra de la inmigración ilegal, Frank Cuesta vuelve a estar en el centro de la polémica debido a unos comentarios realizados hacia Mery Caldas, la novia del tiktoker, youtuber e influencer Alejandro Flexcidine.
Llevamos semanas hablando de Frank Cuesta y su guerra con su exmujer Yuyee, quien estuvo a punto de arrebatarle su querido santuario. Con las aguas más calmadas tras firmar un acuerdo que convierte a Zorro, el hijo de la expareja en el propietario de la finca, el herpetólogo respira aliviado.
Tan tranquilo está que ha decidido acoger en su casa a varios influencers para enseñarles el duro trabajo al que se enfrenta diariamente con los animales. Además, pretende concienciar a estos creadores de contenido de la importancia de respetar el medio ambiente y a todas sus criaturas.
Uno de sus invitados ha sido Alejandro Cid Landó, conocido en las redes sociales como 'Flexcidine'. Con más de 400.000 seguidores en Instagram y casi dos millones en TikTok, Alejandro es un enamorado del Judo y suele compartir vídeos de humor relacionados con la pareja, los amigos y sus dos perros.
Alejandro ha pasado unos días en compañía de Frank Cuesta, quien se sorprendió al ver un vídeo de su novia, la también influencer, Mery Caldas. "La tía está buena, ¿quién es la tía?", pregunta Frank tras ver unas imágenes de Mery. Cuando Alejandro responde que es su novia, el animalista le da la enhorabuena: "Congratulations, está buena tu novia".
Acto seguido, Frank lanza un mensaje a Mery, de 25 años: "Si le dejas y tal... Yo aquí vivo solo". "Cuida de la novia Flexi, no te la voy a quitar", dice en otro vídeo en el que vuelve a referirse a Mery. Sabemos que Frank es un bromista y así lo ha demostrado durante más de una década, pero el humor tiene un límite. Y quizás, "tontear" con una joven de 25 años cuando él tiene 52 y tres hijos más pequeños que la influencer, es un pelín "casposo".
