Las bermudas son el tipo de prenda que compramos con poca ilusión, pero que, al final, acaban siendo las piezas a las que más partido sacamos.
Una de las máximas premisas en verano para construir looks es optar por prendas cómodas y fresquitas. Pese a que esta pauta suele estar presente en nuestras elecciones durante los 365 días del año, lidiar con el calor no es precisamente fácil. Sobre todo, si tenemos que salir a la calle a pleno día. Los vestidos midi de tejidos como el lino o las bermudas anchitas son grandes aliados de los meses más cálidos.]]>