Y para encajar el golpe si no quiere una relación seria.
Conoces a alguien. Conectáis y os gustáis bastante. Empezáis a quedar, al principio de forma tímida pero conforme pasan las semanas se vuelve algo regular. Creáis rutinas: dormir juntos, tener uno o varios días a la semana en los que siempre os veis, os presentáis el uno al otro vuestros respectivos círculos... Todo parece que va bien, pero estás inquieta porque hay algo que todavía no habéis hecho: hablar sobre vuestra relación.]]>