La fórmula de este cosmético recomendado por la marquesa de Griñón contiene pigmentos que garantizan un acabado de lo más natural.
Durante el invierno, los polvos bronceadores son uno de los mejores aliados de nuestro neceser, pues este cosmético da un un tono bronceado a la piel, imitando así el aspecto natural del sol. Principalmente, los utilizamos para resaltar y definir los contornos faciales, lo cual ayuda a crear un aspecto más cálido y con vitalidad. Además, pueden usarse para igualar el tono de la piel, disimular imperfecciones y dar un aspecto más luminoso. Pero esas no son las únicas capacidades de los polvos de sol: también crean un efecto de profundidad y dimensión en el maquillaje. ]]>