Susana Díaz se ha dirigido a los andaluces en su tercer mensaje de fin de año como presidenta de la Junta para hacer balance de 2015 pero sin escapar a la resaca electoral. La dirigente andaluza ha asegurado que los comicios del pasado 20 de diciembre "han abierto un periodo de incertidumbre para nuestra estabilidad como país", considerando "lógico que todos estemos preocupados y demos lo mejor de nosotros mismos para salir cuanto antes de esta situación".
En esa línea ha dicho que, como presidenta, cree recoger "el sentir de la inmensa mayoría de los andaluces" al decir que "la unidad de España y la igualdad de los españoles vivan donde vivan son pilares irrenunciables de nuestra convivencia", apuntando que "en este nuevo tiempo político hace falta acuerdo y concordia". "Pero tenemos que combatir a aquellos que intentan dividir España territorialmente o a los que pretenden ensanchar la insoportable brecha de la desigualdad. Hoy los ricos son cada vez más ricos y las clases medias y trabajadoras están más empobrecidas", a asegurado.
"Unidad e igualdad son compatibles con las necesarias reformas, en todos los órdenes, que necesita nuestra comunidad y nuestro país. Para garantizarnos, sobre todo, un nuevo periodo de progreso y de convivencia como el que lograron abrir, no sin dificultades, los hombres y mujeres que pilotaron la Transición a la democracia", ha dicho. En ese punto de su discurso, difundido simbólicamente desde la Universidad de Sevilla, ha recordando que aquellos "partían de posiciones muy diversas, pero gracias a su generosidad, a su altura de miras y a su capacidad de diálogo, España terminó por superar una situación histórica tan o más compleja que la actual". "Ahora nos toca a nosotros protagonizar otro gran esfuerzo, por Andalucía y por España", ha resaltado.
Díaz opina que "los españoles han expresado con su voto un rechazo rotundo a unas políticas que han generado un importante sufrimiento a millones de personas" y "demandan a sus representantes altura de miras para encontrar lo que realmente importa: soluciones a sus problemas". Para ello, ha advertido, "todos debemos actuar con responsabilidad, con generosidad, demostrando que nuestro mayor y nuestro más firme compromiso es con nuestro país, con su gente, que aspiran sencillamente a una vida mejor".
La presidenta ha dicho que "fue Andalucía la que consiguió que la igualdad entre los territorios y los ciudadanos fuera la premisa fundamental del modelo autonómico español". "Hoy nos toca defender con firmeza el legado de nuestro 28 de febrero para preservar este objetivo", ha aseverado. "Es, también en Andalucía, donde hemos blindado los servicios públicos esenciales, la sanidad, la educación y la atención a las personas con dependencia", ha añadido.
Díaz considera que ha sido "un año intenso en lo político y crucial en lo económico" pero en el que "la ansiada recuperación económica no ha llegado aún para todos". "Es cierto que Andalucía ha tirado del carro de la creación de empleo en España. Uno de cada cuatro nuevos trabajos que se ha creado en nuestro país se ha generado aquí, en nuestra tierra", ha dicho, pero "nuestra gente, y con razón, no puede entender que nadie hable de grandes cifras macroeconómicas cuando la realidad que ellos viven sigue llena de adversidades".
En ese sentido ha señalado que "los ciudadanos piden cosas elementales: un salario digno, un trabajo con derechos y unos servicios públicos de calidad, que sean los que garanticen igualdad y bienestar". Al respecto ha criticado la reforma laboral, porque desde su aprobación "se trabaja mucho, se cobra poco y se cotiza aún menos".
No ha olvidado una referencia a las elecciones autonómicas del pasado marzo. "Los andaluces y andaluzas hablaron en las urnas y lo hicieron con claridad, decidiendo quién quieren que les gobierne y cómo quieren que se gobierne. Sin duda tiene que ser desde el diálogo y anteponiendo siempre el interés de Andalucía a cualquier otro".
También ha hecho referencia a la corrupción, porque la ciudadanía está "exige -y con toda la razón- a sus representantes públicos ética, más cercanía y mayor transparencia en su gestión". "También en esto los ciudadanos piden cosas elementales: honradez y eficacia. Y que desterremos de la vida pública a los corruptos que suponen una vergüenza para nuestro país. Debemos emplear todas nuestras fuerzas para que estos casos no vuelvan a ocurrir", ha indicado.
Entre los otros aspectos a los que se ha referido destaca que Andalucía ha puesto "sobre la mesa la necesidad de un pacto de todos, de un Pacto de Estado. Un pacto para luchar sin tregua contra la violencia machista, que se ha cobrado 56 víctimas en España, 12 de ellas mujeres andaluzas". "No debemos resignarnos a que el año que viene tengamos otras 50 asesinadas. No vamos a aceptar, de ninguna manera, convivir con tanto horror. Tenemos que poner todos los medios a nuestro alcance para luchar contra esta
vergüenza social. Debemos actuar unidos, de la misma manera que lo hacemos frente al terrorismo yihadista. Una amenaza contra nuestra libertad, nuestros valores y nuestra seguridad, a la que debemos derrotar desde nuestra fortaleza democrática".
Por último, y en un escenario acorde como el patio del Rectorado de la Hispalense, ha señalado que "no sobran universidades ni universitarios". "La universidad pública es un emblema de la igualdad de oportunidades y además es una garantía de crecimiento y de futuro para nuestra tierra", ha apuntado.