Consumo abre una investigación a empresas que gestionan cientos de pisos turísticos en varios puntos del país

El Ministerio de Consumo ha abierto una investigación a las grandes empresas que gestionan y administran cientos de pisos turísticos en distintas comunidades autónomas, al considerar que “podrían estar incurriendo” en prácticas comerciales “engañosas” y “desleales”.

Contexto. Esta nueva investigación se suma a la iniciada el pasado mes de junio sobre los anuncios que publican algunas plataformas de alojamientos que no disponen de licencia turística, por ser este tipo de publicidad una práctica que incumple con la Ley General para la Defensa de Consumidores y Usuarios. 

• También el pasado mes de octubre, la Dirección General de Consumo examinó a algunas agencias inmobiliarias que podrían haber ejecutado “prácticas abusivas contra inquilinos en la gestión del alquiler”, según Consumo.

La investigación. En esta ocasión, Consumo se centra en operaciones de pisos turísticos que, aun teniendo licencia, podrían estar siendo gestionados de forma irregular por empresas de intermediación que trabajan en diferentes lugares de España, por presuntamente incurrir en prácticas “engañosas” y “en otras potenciales infracciones”.

Prácticas engañosas. El ministerio destaca que el artículo 5 de la Ley de Competencia Desleal define las prácticas engañosas como “cualquier conducta que contenga información falsa o información que, aun siendo veraz, pueda inducir a error a los destinatarios, siendo susceptible de alterar su comportamiento económico”.

La ley recoge también algunos supuestos de qué tipo de prácticas se consideran engañosas. 

• Entre ellas, afirmar de forma fraudulenta o crear la impresión falsa de que un empresario o profesional no actúa en el marco de su actividad empresarial o profesional.

• O también presentarse de forma fraudulenta como un consumidor o usuario.

Pisos turísticos. El número de inmuebles constituidos como alquileres vacacionales está en constante aumento. Como te contamos en Newtral.es, actualmente ciudades como Madrid y Barcelona tienen más del doble de casas disponibles para alquiler en Airbnb que en Idealista.

• Fuera de las dos grandes ciudades, la desproporción es aún mayor: en Valencia los alquileres vacacionales multiplican por tres a los de largo plazo, mientras que en Sevilla la ratio sube hasta seis.