Qué sabemos de las obras que no se hicieron para reducir el riesgo de inundación en el barranco del Poyo

La parálisis en las obras previstas para reducir el riesgo de inundaciones en el barranco del Poyo ha supuesto un cruce de acusaciones entre Gobierno y oposición sobre las responsabilidades tras la dana.

• El vicesecretario de Organización Territorial del Partido Popular, Miguel Tellado, acusó en el Congreso a la exministra para la Transición Ecológica Teresa Ribera de haber “anulado” en 2021 el proyecto de encauzamiento y drenaje del barranco del Poyo (página 7 del diario de sesiones).

• Ribera respondió: “¿Sabe cuál ha sido la vez que más cerca hemos estado de resolver las obras del barranco del Poyo? Cuando Teresa Ribera, como secretaria de Estado, firmó la única declaración de impacto ambiental favorable a esas intervenciones en diciembre de 2011” (pág. 8).

• A su vez, el PSOE criticó en X que la obra “quedó caducada en 2017”, con el PP en el Gobierno.

Lo que sí se hizo. Las obras por el riesgo de inundación en el barranco del Poyo se llevan planteando desde el siglo XX, como explica a Newtral.es el profesor ad honorem de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) Federico Bonet. 

• En 1995, durante el Gobierno de Felipe González, se aprobó el único proyecto que se ejecutó en el barranco del Poyo –Restitución y adaptación de los cauces naturales de los barrancos Poyo, Torrente, Chiva y Pozalet–.

• Su primera fase finalizó en 2004, durante el Gobierno de José María Aznar. Consistía en ampliar el cauce hasta los 800 m³/s de capacidad.

• El Plan Hidrológico Nacional de 2001 recogió en el listado de inversiones el proyecto Restitución y adaptación de los cauces naturales del barranco del Poyo. (Fase I).

Lo que quedó por hacer. Según Bonet, que también fue director técnico de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) de 2008 a 2012, desde entonces, aunque se han planteado otras fases del proyecto, no se han ejecutado más obras en el barranco del Poyo.

Así, en 2006, se redactó el proyecto Adecuación ambiental y drenaje de la cuenca del Poyo vertiente a la Albufera.

• En él, entre otras actuaciones, se plantearon las obras para crear un nuevo cauce desde el barranco del Poyo hasta el río Turia, que pretendía derivar a este último un posible exceso del caudal de hasta 700 m³/s para reducir el riesgo de inundaciones.

La declaración de impacto ambiental (DIA) del proyecto en su conjunto se aprobó en 2011 con la firma de Ribera como secretaria de Estado de Cambio Climático.

Sin embargo, como especifica Bonet, no llegó a recibir financiación tras la llegada de Mariano Rajoy al Gobierno en medio de la crisis económica.

• Según dice Domingo Baeza a Newtral.es, socio de la Fundación Nueva Cultura del Agua (FNCA) y profesor de Ecología de la Universidad Autónoma de Madrid, esta DIA habría caducado, como mucho, seis años después al no haber comenzado la ejecución de las obras en el barranco del Poyo, de acuerdo con la Ley de Evaluación Ambiental de 2013.

Una década después. Con el inicio del Gobierno de Pedro Sánchez en 2018, Ribera volvió al Ejecutivo. Ese mismo año coincidió con la aprobación de la Ley de la Huerta de Valencia, que establecía la protección de la zona y con la que, según Bonet, las obras en el barranco del Poyo entraban “en contradicción”.

Desde entonces, aparecieron algunas referencias a la conexión del barranco con el cauce del río Turia (vía verde), como en la memoria de contratación de junio de 2020 o en el anuncio de adjudicación de la redacción de esa obra en agosto de 2021.

• Un año y medio después, en febrero de 2023, la CHJ continuaba redactando el proyecto para “aumentar la capacidad hidráulica del barranco del Poyo y de esta manera minimizar el riesgo de inundaciones”, según una respuesta del Gobierno en el Senado.

¿Hay solución? El proyecto de vía verde en el barranco del Poyo era una obra planteada para caudales de hasta 1.500 m³/s frente a los 2.282 m³/s que llegó a registrar la CHJ el 29 de octubre antes de que se rompiera el medidor.

Por esa razón, el experto en hidrogeología y responsable de la campaña del agua de Greenpeace, Julio Barea, subraya la necesidad de “empezar a plantearse otro tipo de infraestructuras” ante estos episodios que superan las previsiones.

También el catedrático de ingeniería hidráulica de la Universitat Politécnica de València Félix Francés recomendó revisar el proyecto en una entrevista para RTVE remitida a Newtral.es por su departamento de comunicación.

• No obstante, Francés aseguró en laSexta Columna que si las medidas planteadas se hubieran llevado a cabo, aunque hubiera habido desbordamiento, “los daños económicos hubieran sido bastante menores”.