Según explican a El Confidencial Digital personas muy próximas al actual portavoz de UDC en la Cámara Baja, Duran i Lleida empieza a asimilar que en los próximos comicios no logrará los votos suficientes para repetir escaño durante una legislatura más. Por ese motivo, ya prepara su retirada de la política.
Una vez celebradas las elecciones del 20 de diciembre, y de confirmarse la desaparición de Unió en el Congreso, Duran i Lleida aguardará hasta el próximo 10 de diciembre para anunciar sus planes de futuro.
Ese día se acaba el plazo que tiene Artur Mas para intentar ser investido presidente de la Generalitat y formar Gobierno. Si no lo consigue, el actual president en funciones deberá convocar, de nuevo, unas elecciones catalanas que se celebrarán en el mes de marzo.
De cumplirse ese calendario, Josep Antoni Duran i Lleida aguantará al frente de UDC durante el primer trimestre del año, con el objetivo de mantener la estabilidad en el partido y dar su apoyo al candidato a esos nuevos comicios, que sería, otra vez, Ramón Espadaler.
El adiós de Duran a la política no implica que el actual portavoz de Unió en el Congreso esté pensando en retirarse profesionalmente. En este sentido, las fuentes consultadas por ECD aseguran que “tiene una importante agenda de contactos empresariales y puede pasarse al sector privado sin problemas”.
En ese sentido, desde UDC recuerdan que este mismo año Duran impulsó, con el argumento de combatir el independentismo desde la sociedad civil, la plataforma “Construim”, en la que están inmersos los principales empresarios de Cataluña. Ese proyecto “sigue vigente y puede ser la rampa para que él cambie de aires”.
Por otra parte, el presidente de Unió nunca ha ocultado que le gustaría acabar su carrera en una consultoría o una auditoría, para trabajar, de esta forma, en un sector relacionado con el Derecho.
