La regatista portará la bandera en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos junto a Marcus Cooper.
La regatista Támara Echegoyen (Pontevedra, 1984), abanderada de España en los Juegos Olímpicos de París 2024, rechaza los focos en solitario. “En todas las competiciones tienes un equipo que merece el podio con nosotras, con un trabajo que muchas veces ni siquiera se ve. No he llegado sola y eso es lo más bonito”, dice a Newtral.es. “Cuando llevas la bandera de España es porque muchas personas han estado involucradas con unos valores que te llenan ese camino hacia un currículum brillante”, dice emocionada.
Campeona olímpica de Elliott 6m en Londres 2012, Támara Echegoyen señala una derrota como el gran aprendizaje de su carrera. En Río 2016 y Tokio 2020 se quedó a un solo escalón del podio en 49er FX. “Fueron dos cuartos puestos muy dolorosos, aunque en el segundo pudo asimilarlo mejor. “He aprendido mucho más de esas derrotas, para mí es natural salir reforzada porque saco lo mejor de lo peor. Es una actitud, una elección”.
Echegoyen, consciente de que por estadística el éxito es más difícil que la derrota, insiste en marcar la importancia de esta reflexión. “Cuando aprendí que el error es positivo, que forma parte del proceso de aprendizaje, mi vida dio un vuelco. La vida de los deportistas fuera de la medalla tiene dos caras, te piden estar orgullosa por un cuarto puesto cuando te están exigiendo una medalla. Creo que deberíamos centrarnos más en los valores excepcionales del deporte que podemos enseñar a la sociedad”.
Acostumbrados a marcar referentes en el terreno de la competición, Támara Echegoyen señala a sus padres. “Mis padres son dos referentes importantes, he tenido un hogar muy igualitario donde han apoyado la diversidad y nos han tratado con igualdad. Eso es algo que me ha abierto muchísimas puertas”, dice, imaginando el momento de portar la bandera de España en la ceremonia de inauguración de París 2024: “Llevaré a mis padres en mi cabeza y a todo el equipo olímpico de vela”.
Ser el centro de atención en estos Juegos Olímpicos de París 2024 es algo que tensa a Támara Echegoyen. “No estoy acostumbrada”, dice sonriendo. Orgullo, responsabilidad y honor son tres términos con los que define este momento, sin olvidarse de quienes le han llevado hasta aquí. “Representar a las pedazo de deportistas que tenemos es un orgullo, muchas son referentes para mí, describen la sociedad en la que vivimos”.
Para Echegoyen, el trato a los deportistas que triunfan en los Juegos Olímpicos y más tarde pasan a un segundo plano social y mediático, no es justo. “El horizonte del deporte español está lleno de estrellas, somos una potencia, pero si nos fijamos solo en tres o cuatro, estamos haciendo sombras. Es un trabajo en equipo. Cuanto más visibilidad tengamos y más acceso a la sociedad, más referentes van a tener”.
Premio Nacional del Deporte como deportista revelación en el año 2012, Echegoyen destaca la responsabilidad que asumen cuando se exponen en unos Juegos Olímpicos. “Toda mi vida he intentado estar rodeada de valores que a veces perdemos. Si hablan de mí como un referente, es porque lo estoy haciendo bien. Estoy muy focalizada en el legado, he hecho las cosas con compañerismo, estricta con las reglas y los valores, con respeto y confianza en el equipo”.
Entrevista Támara Echegoyen
Comité Olímpico Internacional
Premio Nacional del Deporte
