No importa que los asistentes no hayan leídos sus libros; interesa que el escritor esté cerca de la gente.
Ese es el concepto del Hay Festival. "Que cualquier ciudadano de a pie asista a los conversatorios y esas ideas le sirvan para nuevos proyectos", dice
Cristina Fuentes La Roche, Directora de Hay Festival para las Américas.
La edición mistiana arranca mañana en diversos escenarios: Instituto Peruano Alemán, Universidad San Pablo,
Universidad Nacional de San Agustín, Biblioteca Mario Vargas Llosa, etc. Participan decenas de escritores, filósofos, periodistas y creadores. Las entradas son accesibles.
Se pagará un boleto de S/. 5.00 por estas sesiones, donde los intelectuales abordarán diversas temáticas (ver el programa del sábado). Hay ingreso libre para jóvenes y niños; aunque estos cupos ya están copados.
Los boletos se adquieren en el Teatro Municipal y en los lugares donde se desarrollarán las actividades.
¿Por qué se eligió Arequipa y no Lima para esta edición del Hay Festival? Fuentes nos dice que primaron varios criterios. Por ejemplo, la calidad de su centro histórico, cautivante y sobre todo caminable. Se impuso la cuestión descentralista.
"No se quiere que la cultura se concentre en las ciudades capitales". La opinión del
Premio Nobel de Literatura Mario Vargas Llosa también influyó. "Él nos dijo que sería bueno traer el festival al Perú para generar este tipo de conversaciones en un país que había dejado atrás la crisis económica".
"Nos sugirió Arequipa". Vargas Llosa, nacido al pie del Misti, fue varias veces invitado a los Hay Festival. Inicialmente su presencia para esta edición estaba casi asegurada; sin embargo, su vida personal, que dio un giro de 360 grados, lo obligó a cancelar.
Fuentes confía que el autor de La Ciudad y los Perros llegue para la siguiente edición porque "a nosotros nos gusta llegar a un lugar y quedarnos”. Con esta declaración Fuentes asegura la permanencia del Hay Festival en Arequipa, convertida en la segunda urbe latinoamericana en albergar al evento cultural. La primera fue Cartagena de Indias en Colombia.
En la ciudad colombiana el espíritu del festival radica en el festejo de la literatura y el redescubrimiento de una cultura que por muchos años estuvo obturada por los conflictos internos del país. “Cada festival tiene su propia alma y crea formas de consumo diferentes en los espectadores”, explica la encargada para las Américas. Por ejemplo, en México, los temas de migración, narcoliteratura, inmunidad y libertad de expresión son tópicos comunes de debate en los foros.
El carácter que adquirirá la edición Arequipeña recién se empieza a percibir. A un día del inicio del festival se evidencia gran participación de jóvenes. La mayoría de boletos para los conversatorios de las ediciones juvenil e infantil del Hay Festival se agotaron.
No es para menos. A la ciudad llegan personajes de talla mundial como el filósofo Fernando Savater, los escritores Martin Amis, Irvine Welsh, Nadifa Mohamed, Juan Gabriel Vásquez, Mario Bellatin, los periodistas Jon Lee Anderson y Ed Vulliamy, y escritores peruanos como Juan Manuel Robles, Renato Cisneros, Santiago Roncagliolo, Gabriela Wiener, entre otros.
¿Cómo juntar a tantos artistas y pensadores internacionales en el Centro Histórico de una pequeña ciudad como Arequipa? Cristina Fuentes señala que en un lugar pequeño la magia del festival se siente de otra forma. Asegura que esta será una oportunidad para que la Ciudad Blanca se transforme en un foro que anime a la gente del país de Latinoamérica a viajar.
