El atentado contra el expresidente y candidato republicano a las elecciones en Estados Unidos, Donald Trump, ha dejado dos fotografías icónicas para la historia del país. Te explicamos quienes son los fotógrafos y cómo consiguieron capturar las imágenes.
Evan Vucci, el jefe de fotografía de AP
La foto es épica: Trump levanta el puño, con un gesto desafiante, la cara cruzada por un hilo de sangre que prueba que la bala del atentado sí le ha rozado; a su alrededor, hombres y mujeres en traje del servicio secreto tratan de dirigirle a las escaleras para abandonar el escenario.
El autor de esta imagen es Evan Vucci, el jefe de fotografía de la agencia estadounidense Associated Press. Vucci ha explicado cómo tomó la icónica fotografía.
- “Estaba justo delante del escenario, como en cualquier mitin, lo he hecho cientos de veces, cuando sobre mi hombro izquierdo escuché varias explosiones y supe inmediatamente que era de una pistola, así que miré al escenario y vi a los agentes de los Servicios Secretos corriendo hacia el expresidente Trump”.
- En ese momento, Vucci corrió hacia el escenario y fotografió a los agentes que trataban de cubrir el cuerpo de Trump. Después, cuando los agentes levantaban al republicano, se desplazó hacia el otro extremo del escenario, y “mientras bajaba la rampa, levantó el puño hacia al público. No sabía que tenía sangre corriendo por la cara como se puede ver en las fotos, los agentes le bajaron de la rampa, lo pusieron en un coche oficial y volvió a levantar su puño”.
Doug Mills, fotógrafo de The New York Times
Otra de las fotos del atentado para el recuerdo es la que muestra la bala flotando en el aire, justo al lado de la cabeza del presidente Trump que aparece de lado, todavía hablando en el mitin, justo antes de que rozara su oreja y todo se precipitara. El autor de esta fotografía en Doug Mills, un veterano fotoperiodista de The New York Times que toma fotografías presidenciales desde 1983.
- Como explica el medio, para tomar esta imagen Mills utilizó una cámara digital Sony capaz de capturar imágenes de hasta 30 fotogramas por segundo. Tomó estas fotos con una velocidad de obturación de 1/8.000 de segundo, “extremadamente rápida para los estándares del sector”.
- “La mayoría de las cámaras que se utilizan para captar imágenes de balas en vuelo emplean cámaras especiales de altísima velocidad que no se utilizan normalmente para la fotografía normal, por lo que captar una bala en trayectoria lateral como la que se ve en esa foto sería una posibilidad entre un millón y casi imposible de captar aunque uno supiera que la bala se acerca”, explicó a The New York Times Michael Harrigan, agente especial retirado del FBI que trabajó 22 años en la agencia.
Fuentes
The New York Times
AP