Noam Chomsky, uno de los pensadores de izquierdas más influyentes del siglo XX

Noam Chomsky, considerado uno de los referentes intelectuales de la izquierda estadounidense y del mundo más importantes del siglo XX, ha sido dado de alta este martes 18 de junio de un hospital de São Paulo (Brasil), donde se encontraba recibiendo tratamiento médico tras un derrame cerebral que sufrió en julio de 2023 y que le ha provocado dificultades físicas y cognitivas.

• De acuerdo con el diario Folha de São Paulo, la esposa del filósofo y lingüista, Valeria Wasserman, decidió trasladarlo a Brasil en un avión ambulancia para cambiar el tratamiento que recibía en Estados Unidos.

Este pensador, lingüista, filósofo y escritor estadounidense es conocido en la comunidad académica y científica como uno de los padres de la lingüística moderna y es autor de más de un centenar de libros de múltiples temáticas desde la filosofía a la economía o la geopolítica. A lo largo de sus 95 años de vida ha ejercido también como activista político, se ha opuesto al intervencionismo estadounidense y se ha mostrado crítico con las dinámicas de poder gubernamentales. 

Primeros años y formación de Noam Chomsky

Avram Noam Chomsky nació el 7 de diciembre de 1928 en Filadelfia (Estados Unidos), en el seno de una familia judía de clase media. Asistió a una escuela primaria experimental en la que le enseñaron a desarrollar sus intereses y talentos a través de un sistema de aprendizaje autodirigido.

• Comenzó a interesarse por la política y lingüística durante su infancia. Prueba de ello es el artículo que escribió a los 10 años en el periódico de su colegio lamentando la caída de Barcelona en la Guerra Civil Española y el ascenso del fascismo en Europa.

Noam Chomsky estudió lenguaje y filosofía en la Universidad de Pensilvania, donde se doctoró en Lingüística en 1955. Ese mismo año se unió al equipo docente del Instituto Tecnológico de Massachusetts y fue nombrado catedrático del Departamento de Lingüística y Filosofía en 1961. El pensador se incorporó al cuerpo docente de la Universidad de Arizona en 2017 como profesor laureado en el Departamento de Lingüística.

• Contribución como lingüista. Chomsky propuso a finales de los años 50 que el cerebro humano posee un conocimiento innato, pre-programado, que le permite adquirir y desarrollar el lenguaje, una rompedora teoría hoy mayoritariamente aceptada y cuyas implicaciones han impulsado nuevas vías de investigación en muy diversos campos científicos y humanísticos.

Ideología y activismo político

La enorme aportación de Chomsky en la lingüística moderna la llevó a cabo mientras dedicaba la mayor parte de su tiempo al activismo político. Noam Chomsky es autor de decenas de libros sobre filosofía política desde una perspectiva progresista y de la izquierda igualitaria y sobre ello ha dado numerosas conferencias en diferentes países.

El pensador y activista se define ideológicamente como “socialista libertario”, de tendencias anarco-sindicalistas y muy crítico con la política exterior estadounidense y sus numerosas intervenciones militares en todo el mundo, especialmente en América Latina y Oriente Medio.

• Aunque Noam Chomsky siempre estuvo interesado en la política, no se involucró públicamente en ella hasta 1964, cuando se sintió obligado a prestar su voz a las protestas contra el papel de EEUU en lo que él calificó como “la invasión de Vietnam”. 

• Además, se ha pronunciado durante años contra el apoyo de su país a regímenes autoritarios, al derrocamiento de Gobiernos democráticos, como el de Salvador Allende en Chile, y también contra la represión de Israel a la población palestina.

Sistema económico. Noam Chomsky rechaza el sistema económico capitalista y considera que el enemigo más peligroso de la libertad lo constituye la explotación económica y la esclavitud sociopolítica llevada a cabo por las empresas multinacionales.

•  En este sentido, se opone también al neoliberalismo, argumentando que disminuye la capacidad de la población para influir en las decisiones políticas.

Por otro lado, rechaza el papel ideológico de los principales medios de comunicación corporativos, que, según él, “fabrican consentimiento” hacia la conveniencia del capitalismo y realizan propaganda ante los poderes políticos que lo apoyan.