La dimisión del presidente, la convocatoria electoral o la cuestión de confianza son las tres opciones abiertas de cara al lunes.
Pedro Sánchez ha decidido cancelar su agenda política para reflexionar si renuncia o no a la jefatura del Gobierno, una decisión que dará a conocer el próximo lunes y que abre tres escenarios posibles –su dimisión, una convocatoria de elecciones o una cuestión de confianza– con sus respectivas fechas.
29 de abril: El presidente del Gobierno comparece para comunicar la decisión de emplazar a los españoles a unas elecciones.
29 de mayo: De acuerdo con la Constitución, no se pueden disolver las Cortes Generales ni convocar unas nuevas elecciones generales antes del próximo miércoles 29 de mayo, pues todavía no ha pasado un año desde la anterior disolución.
21 de julio: Es una fecha clave, pues es el primer domingo que Sánchez tendría disponible para situar la celebración de las elecciones generales.
29 de abril: Pedro Sánchez decide dar un paso al lado y que el rey Felipe VI proponga un candidato a la Presidencia del Gobierno. Para ello, el monarca tiene que llevar a cabo previamente una ronda de consultas.
Principios de mayo: Si sale hacia delante una opción de esa ronda, Francina Armengol, presidenta del Congreso, es quien tiene la potestad de fijar la fecha de la investidura.
Principios / mediados de julio: Si transcurridos dos meses desde la primera fecha de la votación de investidura ningún candidato consigue el respaldo de la Cámara Baja, el Rey disolverá las Cortes y convocará elecciones (Sánchez estaría en funciones mientras tanto al haber dimitido).
29 de abril: El presidente del Gobierno opta por someterse a una cuestión de confianza.
Mediados / finales de mayo: Teniendo en cuenta el calendario del Congreso, la sesión plenaria de la cuestión de confianza podría ser la semana del 20 o del 27 de mayo.
