Mientras el Gobierno plantea cómo será el regreso a las aulas el próximo curso, se ha registrado un dato alentador. La vacunación de docentes y personal educativo ha hecho que el número de bajas por incapacidad temporal por infección de COVID-19 en este colectivo caiga de las 2.073 que se llegaron a registrar en enero a apenas 16 el primero de mayo, último dato disponible según el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones.
Así lo ha difundido en Twitter el ministro del ramo, José Luis Escrivá, que ha mencionado que “igual que sucedió con los sanitarios, el avance del proceso de vacunación en el sector educativo está logrando reducir con gran rapidez los contagios en este colectivo”.
El 25 de febrero comenzó la vacunación de los docentes que forman parte del grupo prioritario de trabajadores esenciales, en concreto de docentes y personal de educación infantil, especial, primaria y secundaria.
En el gráfico se muestra, a través de una línea suavizada, cómo el número de bajas por infección por COVID-19 en el sector educativo comienzan a bajar a partir de esa fecha. Desde el Ministerio explican que antes de que la campaña de vacunación llegara a este colectivo, las bajas en el sector de la educación representaban el 5,2%, mientras que ahora suponen el 3,7% de todas las bajas.
“En estos dos meses el descenso de infecciones ha sido mucho más acusado entre los trabajadores en el sector educativo. Así, la probabilidad actual de caer infectado por COVID-19 en el sector educativo es casi la mitad que en el resto de sectores”, señalan a Newtral.es.
El pico registrado en Semana Santa se debe a que, por lo general, durante las vacaciones muchas personas optan por no acudir al médico para pedir la baja, añaden.