La industria naval rusa ofreció su tecnología a los países latinoamericanos para potenciar sus flotas de buques de guerra en SITDEF, la mayor feria de defensa que acoge la capital peruana del 18 al 21 de mayo.
"Estamos dispuestos para la colaboración tecnológica en (...) el diseño y construcción conjuntos de embarcaciones de distintos tipos", dijo a Sputnik el jefe de la delegación rusa, Anatoli Punchuk.
El alto funcionario, también director adjunto de la agencia rusa para la cooperación militar internacional (FSVTS), destacó el interés de varios países latinoamericanos por los buques patrulleros.
Punchuk señaló asimismo que Rusia estaba interesada en organizar el ensamblaje de equipamiento militar en los países de la región.
TRANSFERENCIA TECNOLÓGICA A PERÚ
El vicedirector de la FSVTS adelantó además que su país podría prestar apoyo tecnológico a Perú en la producción de equipos militares.
"Estamos estudiando prestar ayuda tecnológica a Perú en la producción y reparación de equipos militares y esperamos alcanzar un acuerdo concreto durante la celebración de este salón", señaló.
Rusia esta construyendo en Perú un centro de servicio técnico para helicópteros que comenzaría a operar en 2018.
MÉXICO APUESTA POR LOS HELICÓPTEROS MI
Punchuk confirmó en el evento el interés de México por completar su flota con más aparatos Mi-17 y Mi-8.
"México expresa interés en adquirir lotes adicionales de los helicópteros Mi. (…) Esperamos que logremos acuerdos mutuamente beneficiosos con nuestros socios mexicanos", indicó.
Punchuk subrayó que hoy México es uno de los mayores operadores de helicópteros rusos.
"Las ventajas técnicas de nuestros helicópteros en comparación con los aparatos extranjeros se hicieron especialmente evidentes durante la paliación de las consecuencias de emergencias y desastres naturales", apuntó.
Se estima que entre 1994 y 2002 México había adquirido 11 Mi-8 y 24 Mi-17.
En 2012, la Armada mexicana recibió tres máquinas Mi-17V-5, una versión modernizada del modelo Mi-8T.
También se sumaron a la flota mexicana dos helicópteros gigantes Mi-26.
Las armas rusas pisan fuerte en América Latina
