Sean 'Diddy' Combs vuelve a situarse en el centro del foco judicial. Sus abogados han solicitado formalmente a un tribunal federal de apelaciones de Nueva York que ordene su puesta en libertad inmediata o, en su defecto, que se reduzca de forma sustancial la condena de cuatro años y dos meses de prisión que cumple actualmente por delitos vinculados a la prostitución. El equipo legal del rapero sostiene que la sentencia impuesta fue desproporcionada y que el juez que presidió el caso, Arun Subramanian, tuvo en cuenta elementos por los que el artista fue expresamente absuelto durante el juicio celebrado el pasado mes de julio. En su escrito, los letrados denuncian que el magistrado actuó como un «decimotercer jurado» , incorporando a la condena consideraciones que, a su juicio, contradicen el veredicto alcanzado por los miembros del jurado popular. Combs, de 56 años, fue declarado culpable de dos cargos de transporte interestatal con fines de prostitución, tipificados en la Ley Mann, pero quedó absuelto de los delitos más graves de conspiración criminal y tráfico sexual. A pesar de ello, sus abogados consideran que la pena impuesta excede con creces los estándares habituales para este tipo de infracciones, que suelen traducirse en condenas notablemente inferiores, incluso en supuestos donde se acredita coacción, algo que el jurado no determinó en este caso. En la apelación presentada, la defensa subraya que el tribunal basó la sentencia en una interpretación propia de los hechos, atribuyendo al rapero comportamientos de abuso, control y explotación hacia sus exparejas que, según los abogados, no fueron confirmados por el fallo judicial. De hecho, critican que se utilizara como agravante el testimonio de antiguas parejas sentimentales y pruebas relacionadas con episodios de violencia que no derivaron en condenas por los delitos más graves. Durante el juicio, varias exnovias de Combs relataron dinámicas sexuales que describieron como impuestas y humillantes, así como episodios de violencia física. Uno de los momentos más impactantes fue la proyección de un vídeo de 2016 en el que se ve al artista agrediendo a Cassie Ventura en un hotel de Los Ángeles. El juez hizo referencia expresa a estas conductas en el momento de dictar sentencia, argumentando que evidenciaban un patrón de abuso de poder. La defensa, sin embargo, insiste en que estos elementos no podían emplearse para endurecer la pena una vez descartados los cargos de mayor gravedad. Además, ha planteado que algunas de las conductas juzgadas, incluidas l a grabación de encuentros sexuales consensuados, estarían protegidas por la Primera Enmienda, un argumento que ya fue rechazado en primera instancia. Actualmente, Sean 'Diddy' Combs cumple condena en una prisión federal de Nueva Jersey y, si no prospera la apelación, no recuperará la libertad hasta mayo de 2028. El tribunal de apelaciones aún no ha fijado fecha para escuchar los argumentos orales del caso.
