Las transferencias bancarias cambian desde este 9 de enero. El motivo es una nueva normativa aprobada por la Unión Europea que busca homogeneizar el envío de este tipo de dinero. El objetivo final es «crear un mercado integrado de transferencias inmediatas» y para ello, como indica el reglamento, es necesario que «las operaciones se procesen de conformidad con un conjunto común de normas y requisitos». La nueva norma lo que hace es equiparar los dos tipos principales de transferencias que existían hasta ahora. Las ordinarias -que llegan en un plazo de 24 a 48 horas- y las inmediatas -que llegan en el momento, pero hasta ahora con un coste-. En este sentido, los usuarios de las entidades bancarias verán dos cambios notables. En primer lugar, el reglamento fija en 10 segundos el tiempo por el que una transferencia deberá llegar a su destinatario con «independencia del día o la hora». En segundo, y en cuanto al precio, es que las transferencias ordinarias e inmediatas deben igualar su coste. La siguiente cuestión a la aplicación de esta normativa es qué van bancos van a aplicarlo y cómo lo van a hacer. En los últimos tiempos, los bancos españoles han ofrecido transferencias inmediatas a cambio de una comisión para el ordenante, que por lo general era un importe mínimo. La nueva norma les obliga a adaptarse. En términos prácticos, lo que dice la norma es que las transferencias inmediatas deberán tener el mismo coste que las transferencias ordinarias . A través de internet, en la mayoría de bancos las transferencias ordinarias eran gratuitas. Es por ello que con la aplicación de la norma - como informó ABC - los grandes bancos españoles se van a adaptar y las transferencias inmediatas serán gratuitas como ya lo eran las ordinarias , por lo que ambas tendrán el mismo coste como indica la norma o, dicho de otra manera, serán gratis. No obstante, conviene consultar con la entidad cómo va a aplicar la normativa ya que si las transferencias ordinarias ya tenían coste -o lo han aumentado- podrán seguir teniéndolo . Además de este supuesto, hay otro caso en los que los bancos prevén seguir cobrando por realizar una transferencia inmediata. Las que pasan a ser gratuitas son las ordenadas a través de canales online, por lo que realizar un pago instantáneo desde la oficina o por teléfono seguirá teniendo un coste para el usuario. Como informó este diario, los bancos han estado adaptando sus sistemas y la mayoría no prevé grandes cambios en sus políticas. El objetivo de las entidades también es ir fomentando las operaciones online, con lo que este cambio es supone un incentivo a sus clientes respecto a la forma de operar.
