El Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS) acogió el pasado año a un total de 367 menores extranjeros no acompañados, el doble que en 2023 cuando la entidad insular atendió a 180. El consejero insular Guillermo Sánchez, responsable de la tutela de estos menores, ha hecho balance de la llegada de inmigrantes extranjeros menores de edad llegados a bordo de pateras en 2024 desde las costas de Argelia y ha expuesto la «complicada situación» que sufre la Isla con los servicios asistenciales con una sobresaturación del 70 %. La ruta consolidada desde Argelia no ha parado de crecer en los últimos años y está desbordando los servicios asistenciales. Tres de cada cuatro menores que acceden al sistema de protección en Mallorca son inmigrantes no acompañados. Ante esta situación, el titular del IMAS ha pedido la implicación del Gobierno central de Pedro Sánchez para que se refuercen las políticas migratorias, se pongan controles desde el país de origen -algo que «brilla por su ausencia», ha indicado-, y ceda espacios públicos. Tras varias llamadas de auxilio, a finales del pasado año, el Ministerio de Defensa, a través de la Delegación del Gobierno en Baleares, ofreció un antiguo polvorín en Inca para que el gobierno insular (PP y Vox) pudiera atender a estos menores no acompañados que llegan a Mallorca a bordo de pateras. Pero esta posibilidad se ha frustrado tras una intensa polémica entre los vecinos de este municipio, después de que «el PSOE filtrara la ubicación y comprometiera su viabilidad», ha denunciado el responsable del IMAS. De este modo, el Consell de Mallorca ha zanjado el tema con el anuncio de que renuncia a habilitar este nuevo centro de primera acogida. Alega que la «exposición mediática» impedía proteger la privacidad de los menores no acompañados, y no favorecía un entorno de tranquilidad para los trabajadores y entidades. «Hasta ahora había un compromiso de discreción que se ha roto», ha recriminado Guillermo Sánchez, quien ha reclamado a los medios de comunicación que no informen sobre futuras localizaciones de centros de menores tutelados para proteger a los usuarios y trabajadores. «Pese a que este recinto contaba con las características adecuadas, la exposición pública de su ubicación, promovida por el Partido Socialista cuando todavía era solo una propuesta en valoración , ha comprometido gravemente la viabilidad del recurso», ha lamentado Sánchez, que paralelamente ha destacado el papel colaborador de la Delegación del Gobierno en las islas para encontrar espacios adecuados para acoger a los menores. Inca ya cuenta con tres centros de menores. Su alcalde, el socialista Virgilio Moreno, se opuso desde el primer momento al ofrecimiento del polvorín argumentando que este espacio no era adecuado y estaba en ruinas. Este martes ha aplaudido que finalmente el Consell de Mallorca desista. De igual modo, el PP de Inca también se ha declarado «satisfecho» por que este centro finalmente no se ponga en marcha en el municipio. El presidente del IMAS ha vuelto a lanzar una llamada de auxilio al Gobierno de España para que ponga los recursos necesarios para atender lo que considera «una crisis migratoria sin precedentes». «Esta situación no puede recaer exclusivamente en las instituciones locales. Pedimos colaboración y responsabilidad a todas las administraciones implicadas», ha apostillado. Finalmente, el presidente del IMAS ha advertido de que si hay un incremento exponencial de llegada de inmigrantes, desde el IMAS se tendrá que ofrecer un servicio «meramente asistencial» , como ya ocurre en comunidades como Canarias, sin descartar el uso puntual de tiendas de campaña para ubicar a los menores.