CARACAS, enero 6.— La Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) rechazó lo que llamó el mensaje «ridículo, paupérrimo, pírrico y sin sentido» del excandidato presidencial opositor Edmundo González, autoexiliado en España y prófugo de la justicia, quien se consideró en el texto como «comandante en jefe» de ese cuerpo y llamó a los uniformados a sumárseles en el supuesto afán «de paz» con que calificó su anunciado intento de regresar a Venezuela y ser investido el próximo día 10, fecha de la toma de posesión de Nicolás Maduro.
Montado sobre la falsa tesis del fraude del que nunca presentó pruebas la derechista Plataforma Unitaria Democrática, que él representó en los comicios presidenciales del 28 de julio, y erigiéndose como supuesto «presidente electo», González publicó el provocador mensaje en la red social X justo cuando visitaba en Washington al saliente presidente Joseph Biden quien, con apenas 15 días por delante en la Casa Blanca, le brindó «su apoyo», según dijo González, que habló de una reunión «larga y fructífera».
«Rechazamos categóricamente y con absoluta vehemencia este payasesco y bufo acto de politiquería despreciable, que no tendrá el más mínimo calado en la robusta conciencia patriótica de la FANB, la cual, en perfecta fusión popular militar policial, defenderá a ultranza la Constitución y las leyes de la nación, así como su libertad, soberanía e independencia», dio a conocer en su respuesta el vicepresidente de Defensa y Soberanía de Venezuela, Vladimir Padrino, al tiempo que ratificó el reconocimiento al relecto presidente Maduro.
González, quien desde antes de las elecciones evitó comprometerse con el reconocimiento de sus resultados, y junto con la opositora María Corina Machado enardeció a las bases opositoras y provocó conatos de violencia con la proclamación del falso fraude, rehusó después presentarse ante la Sala Electoral del Tribunal Supremo con las pruebas necesarias para ventilar sus denuncias a pesar de que fue varias veces citado, y fue formalmente imputado el pasado día 2 por la Fiscalía venezolana por los delitos de conspiración, complicidad en el uso de actos violentos contra la República, usurpación de funciones y forjamiento de documentos, entre otros, por lo que ese alto tribunal emitió orden de captura en su contra.
De acuerdo con ello, el titular de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, comunicó este lunes que solicitará el arresto inmediato de González en caso de que ingrese a territorio nacional.
«Nosotros estamos obligados a contribuir con la Fiscalía General de la República y cada diputado que defiende la paz solicitaremos, en caso de que toque un palmo de terreno de la República Bolivariana de Venezuela, el arresto inmediato (de Edmundo González) por usurpación de funciones, traición a la patria y lavado de dinero», dijo ante el Parlamento.
Rodríguez también hizo mención a los expresidentes de México Felipe Calderón y Vicente Fox, a la expresidenta panameña Mireya Moscoso y al expresidente de Bolivia Jorge Quiroga, y aseguró que ninguno de ellos es bienvenido en Venezuela.
En torno a la figura de González y su «manejadora», María Corina Machado con sus denuncias de supuesto fraude, se conforma toda una campaña que pretende emular el falso interinato de Juan Guaidó para desconocer el proclamado triunfo electoral de Maduro y, por tanto, a la institucionalidad de Venezuela.
Recabando respaldo bajo esa cuerda, González se reunió en los días recientes con figuras prominentes de la derecha regional como el libertario presidente argentino Javier Milei y con el saliente mandatario uruguayo Luis Lacalle Pou, cuya coalición de gobierno fue derrotada en comicios recientes por el progresista Frente Amplio, y sostuvo una videoconferencia con el jefe de Estado paraguayo, Santiago Peña, dijeron reportes de prensa.
Este lunes se conoció precisamente la decisión venezolana de romper relaciones con el Gobierno de Paraguay y proceder al retiro inmediato de su personal de esa nación.
En una nota divulgada por Telesur, la Cancillería bolivariana rechazó las declaraciones del mandatario paraguayo Santiago Peña quien, dijo, «reincide en una práctica fracasada que recuerda las fantasías políticas del extinto Grupo de Lima» e ignora el Derecho Internacional y el principio de no intervención.
El comunicado consideró lamentable que gobiernos como el de Paraguay continúe subordinando su política exterior a los intereses de potencias extranjeras y se dediquen a promover agendas desestabilizadoras y que socavan los principios democráticos de los pueblos libres.
Mientras, en Venezuela, las fuerzas políticas y populares bolivarianas, y los sectores amantes de la estabilidad nacional, se han convocado para acompañar a Maduro el día 10, en su toma de posesión.
