Casi un centenar de médicos especialistas planteó su renuncia a los hospitales de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) en las últimas semanas, según datos de la institución al 3 de enero.
A esa fecha, 122 médicos entregaron su solicitud de cese de nombramiento. De ellos, 99 concretaron su salida de los hospitales, mientras que 23 revocaron su renuncia por diferentes razones.
La CCSS confirmó a La Nación que solo en diciembre salieron 33 especialistas. Se espera que en enero otros 24 dejen los hospitales públicos.
Las especialidades que registran más salidas son Radiología e imágenes médicas, Anestesiología y Ginecoobstetricia, informó la CCSS. En un informe al 20 de diciembre, solo la especialidad de Radiología registraba la renuncia efectiva de 12 médicos.
Hasta el 20 de diciembre, la afectación mayor se concentraba en la producción quirúrgica, con números negativos. Por ejemplo, si los martes de la semana que iba del 1.º al 20 de diciembre se hicieron, en promedio, 668 cirugías, en el martes de la semana entre el 14 y el 20 se efectuaron 573; es decir, casi un 14% menos, según datos del Área de Estadística en Salud, de la Gerencia Médica.
Para el mismo periodo analizado por Estadística de la CCSS, los servicios de atención de emergencias y citas en consulta externa aún se mantenían con saldos favorables.
La CCSS declaró emergencia institucional la situación provocada en los hospitales por la renuncia de especialistas, quienes eligieron solicitar cese de nombramientos con la pretensión de ser recontratados con el salario global, de ¢2,8 millones, mayor al que reciben actualmente.
Según la información analizada por la Junta Directiva para aprobar esa declaratoria, se espera que esta emergencia se prolongue al menos seis meses. El máximo órgano de decisión de la CCSS podría prorrogar esa declaratoria si fuera necesario.
El costo de implementar cinco medidas del plan para garantizar la continuidad de los servicios críticos ante la renuncia de los especialistas sería de ¢8.185 millones solo en los primeros seis meses de atención de la emergencia.
Un informe presentado el 12 de diciembre por el gerente financiero, Gustavo Picado Chacón, a la Junta Directiva de la Caja, reveló que si se realizara un ajuste técnico de ¢300.000, 600 médicos (especialistas) superarían la barrera del salario global.
El 5 de diciembre, la presidenta ejecutiva de la Caja, Laura Ávila Bolaños, reveló a la Junta que los ajustes técnicos a la base salarial son “jurídicamente posibles”, según la Procuraduría General de la República (PGR).
Las gerencias Financiera y Administrativa y la Dirección Actuarial y Económica de la Caja analizan la viabilidad de un ajuste técnico a los salarios de los médicos especialistas a partir de un criterio emitido por la PGR.
