El comercio online ha dado un paso agigantado en todo el mundo, especialmente a raíz de la pandemia del Covid, y también en España y en estos días se nota especialmente. Cada vez más personas optan por comprar los regalos de Navidad por Internet, por sus facilidades, y eso se traduce en que muchas calles se llenan de furgonetas de reparto. Igualmente los contenedores de cartón acaban repletos de cajas de todos los tamaños. Las empresas optan por grandes embalajes para proteger el producto, evitar daños durante su envío y en algunos casos para cumplir con las regulaciones y normativas, por ejemplo en casos de alimentos o productos electrónicos. Cuando los compradores abren los paquetes lo primero que suelen hacer es tirar a la basura estas cajas voluminosas para ganar espacio en casa y ahora una experta ha lanzado un aviso al respecto. Ella es la criminóloga especializada en ciberseguridad María Aperador, que en su cuenta de TikTok @mariaperadorcriminologia ayuda a sus seguidores a «protegerse de los cibermalos». «Mucho cuidado con los paquetes que tiras a la basura», avisa en este vídeo, que en menos de un mes ha superado ya las 855.000 visualizaciones. En la publicación María cuenta que otra 'tiktoker' explica en un vídeo que «un seguidor ha estado rebuscando en su basura en búsqueda de algún documento o de algún paquete con información sobre ella» y mientras lo narra muestra los típicos embalajes con etiquetas blancas en las que los repartidores tienen direcciones y nombres de envío. «Esta práctica es muy habitual y se llama 'dumpster diving' o 'trashing' », desvela la experta en seguridad, que añade que precisamente consiste en rebuscar en la basura de alguien «para obtener más información sobre esa persona o sobre su familia». María alerta que cuando tiramos a la basura cualquier documento o caja de algún paquete «es muy importante que destruyamos la información que hay». Todo ello, comenta la criminóloga, «porque hay personas que se dedican a rebuscar en la basura para después personalizar estafas, engaños o chantajes con la información que obtienen». «Es muy importante que cuidemos también nuestra seguridad física», acaba ella su publicación, que ha recibido centenares de comentarios. Muchos usuarios confirman que ellos sí rompen, rayan o queman la zona con datos. El vídeo, además, cuenta con imágenes especialmente interesantes en la que se ve que es posible borrar fácilmente la información con un algodoncillo y un líquido que parece alcohol. Un internauta añade en los comentarios que él lo hace con acetona mientras que otro dice que solo con pasar por encima un mechero el papel acaba todo negro y la información ya no se puede ver.