El cierre de las festividades navideñas da paso a la esperada Bajada de Reyes, una tradición católica que reúne a familias y amigos en una celebración cargada de simbolismo y unidad. Esta costumbre, profundamente arraigada en la cultura peruana, trasciende el ámbito religioso para convertirse en una manifestación cultural que fortalece los lazos comunitarios.
La llegada de Gaspar, Melchor y Baltasar, rememorada cada enero, no solo revive el relato bíblico, sino que también actúa como un puente que conecta generaciones y valores, lo que consolida su lugar como una expresión viva del patrimonio cultural y espiritual del país.
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En Perú, la Bajada de Reyes Magos 2025 se conmemorará oficialmente el lunes 6 de enero, una fecha que marca el cierre de las celebraciones navideñas y que ocupa un lugar destacado en el calendario litúrgico anual. No obstante, muchos fieles católicos prefieren adelantar la festividad al primer domingo de enero, que en esta ocasión será el día 5.
Durante esta jornada, las parroquias y comunidades suelen organizar actividades especiales para recordar la llegada de los Reyes Magos, incluyendo misas solemnes. En el ámbito familiar, es común llevar a cabo reuniones donde, como parte del ritual, se desarman los nacimientos y pesebres, lo que cierra así el ciclo de la Navidad.
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La Bajada de Reyes Magos, conocida también como Día de Reyes en algunas regiones de Latinoamérica, es una festividad religiosa que conmemora el homenaje ofrecido por los tres Reyes Magos, Melchor, Gaspar y Baltasar, provenientes de Oriente, al Niño Jesús en Belén de Judea hace más de dos mil años.
De acuerdo con la tradición católica, los Reyes Magos representan a las religiones paganas de las regiones cercanas que, al enterarse del nacimiento de Jesús, reconocieron su divinidad como el Hijo de Dios. Estos sabios, guiados por el brillo de una estrella, emprendieron un extenso recorrido desde sus tierras natales hacia Belén, con el propósito de encontrar al "rey de los judíos", rendirle tributo y entregarle tres significativos obsequios.
En Perú, la celebración de la Bajada de Reyes trasciende el ámbito litúrgico, integrándose en las tradiciones culturales. Una de las actividades más representativas son los recorridos protagonizados por los Reyes Magos, quienes, montados en caballos y portando oro, incienso y mirra, recrean su simbólica visita al recién nacido Jesús.
Además, muchas familias peruanas conmemoran esta fecha con reuniones que incluyen cenas o lonches, donde comparten alimentos característicos de la temporada, como chocolate caliente, panetón y platillos elaborados con pavo, entre otros, con lo cual se destaca el espíritu de unidad y celebración propia de estas festividades.
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Según la tradición cristiana, los Reyes Magos arribaron al lugar donde nació Jesús portando tres obsequios llenos de profundo significado: oro, incienso y mirra. Aunque estos regalos no suelen estar entre las peticiones habituales de los niños en sus cartas a los Reyes Magos, su relevancia es fundamental en el relato religioso.
El oro simboliza la soberanía de Jesús, reconociéndolo como el Rey de los judíos y el Mesías anunciado. El incienso, una resina aromática empleada en rituales sagrados, representa su naturaleza divina y su papel como intermediario entre Dios y la humanidad. Por último, la mirra, usada tradicionalmente en prácticas de embalsamamiento, refleja su condición humana y anticipa el sufrimiento y el sacrificio que enfrentaría en la cruz.