Hace ya un tiempo, intercambiando unas palabras e impresiones con un conocido que pertenece al sector separatista catalán, llegué a plantearle la siguiente cuestión: ¿Por qué a mí, catalán y constitucionalista español, me consideráis menos catalán que vosotros? Ser español, no es ser menos catalán, y menos eso que nos llamáis: catalanes de segunda.