Atrás ha quedado el 2024, un año que no ha sido nada fácil para el Sevilla FC . Y es que el club de Nervión se quedó fuera de Europa tras conseguirlo consecutivamente durante once temporadas. Un jarro agua fría que certificó el final de un ciclo dorado para los blanquirrojos. El descenso del rendimiento deportivo del equipo derivó también en una crisis económica, que ha llevado al club a activar un plan de recortes para ajustar el gasto a la nueva realidad. También se le dio continuidad al rejuvenecimiento paulatino de la plantilla , con el objetivo de captar nuevos talentos revalorizables y así volver a conseguir ingresos a través de la venta de jugadores. Una vuelta a los inicios. Para ello, Víctor Orta realizó un total de veinte operaciones entre salidas y entradas de jugadores con el objetivo de reducir masa salarial. Aun así, el descenso de ingresos del Sevilla fue tan drástico y el gasto de la plantilla tan alto, que los hispalenses no cumplen con el fair play financiero . Por lo que LaLiga mantiene restringidos los movimientos de los sevillistas para este próximo mercado de invierno. Aun así, de este 2024 se pueden sacar algunos brotes verdes como, por ejemplo (y uno de los más importantes), el entrenador. El fichaje de Xavi García Pimienta no convenció de primeras al sevillismo, pero su capacidad de adaptación y su buena mano con los futbolistas jóvenes ha hecho de este nuevo grupo un equipo que sabe competir. Algo que no se había visto en la temporada anterior. No obstante, para que el trabajo siga evolucionando, es evidente que el Sevilla requiere de más mimbres de cara a la segunda vuelta. De ahí, que el primer propósito del año para el club de Nervión sea la de fichar al delantero y al extremo que han prometido para este invierno. El Sevilla quiere buscarle un nuevo destino a Iheanacho para así poder fichar a Juninho. De esta operación depende en gran parte el mercado de enero de Orta. Desde el club son conscientes de que ha sido un fichaje decepcionante y quieren enmendar el error trayendo al '9' del Qarabag. También está aún en proceso del fichaje de Rubén Vargas, el extremo pretendido por el director deportivo sevillista, que termina contrato este próximo junio con el Augsburgo. Otro asunto pendiente para este nueva ventana de fichajes es la de liberar masa salarial. En verano, hay varias operaciones que se quedaron pendientes, como las ventas de Gonzalo Montiel y Marcao, la salida de Pedro Ortiz e incluso el cambio de aires de Suso . Quitando al canterano, estos jugadores son los que concentran las fichas más altas del equipo y lo que menos cuentan para García Pimienta. Con la absolución de Montiel de un presunto delito de abuso sexual , se desbloquea su salida, puesto que el lateral es uno de los activos con más cartel del plantel. Entre tanto movimiento de jugadores, y con la retirada de Jesús Navas, queda en el aire quién cogerá el dorsal 16 y quién se erigirá como el nuevo líder del vestuario. El propósito del Sevilla es el de otorgarle el dorsal a un canterano del primer equipo , siendo Carmona y Juanlu las opciones más consensuadas. Mientras que, aunque el hueco de Navas no lo puede ocupar cualquiera, hay dos jugadores con madera de líder dentro del plantel: Gudelj y Saúl . El serbio será el primer capitán por su recorrido en el Sevilla, pero el ilicitano desde que llegó dejó claro que quería ser un referente para los jóvenes de la plantilla. Al excolchonero sólo le queda tener más continuidad vistiendo la camiseta sevillista para terminar de hacerse con el vestuario. Si los sevillistas consiguen reforzarse bien y tener un líder con carisma, su próximo objetivo para lo que resta de temporada es, al menos, ilusionar con un regreso a Europa . Y si no puede ser este año, dejar bien puestos los cimientos para que la 25-26 sea la del regreso al continente. Dejando a un lado lo deportivo, el propósito más inmediato de la actual directiva es la de salir indemne de la próxima junta ordinaria de accionistas . Una asamblea que se celebrará el 10 de enero y que promete ser también movida. El pacto de agrupación de acciones ha expirado y hay mucha expectación de cómo los actuales dirigentes del club van a mantener estable su mandato. Para este 2025, uno de los propósitos del Sevilla es la de buscar una tregua de esta guerra accionarial. Un conflicto entre Del Nido Benavente y el actual consejo de administración , que no ayuda a llevar correctamente la gestión de la entidad. Son varios años los que el Sevilla no tiene las cuentas aprobadas, el engordamiento de la deuda tampoco ayuda a recibir apoyos, pero hay muchos proyectos en el horizonte (como el del nuevo estadio) que requieren de una unidad en el seno del Sevilla. No obstante, no parece que la conciliación entre ambas partes esté cerca, y menos cuando el Sevilla ha sancionado con 20 partidos sin poder entrar al estadio a Del Nido Benavente . Una sanción que el máximo accionista recurrirá ante la justicia ordinaria.
