La caleta El Ñuro, conocida por el emblemático nado con tortugas, enfrenta un duro golpe económico tras el colapso de su infraestructura turística. Más de 50 familias han perdido su principal fuente de ingresos luego de que las intensas olas del pasado 27 de diciembre provocaran el derrumbe de las escaleras y el puente flotante que permitían el acceso de más de 200 visitantes diarios.
El fenómeno natural, calificado como oleaje anómalo, ha dejado a este destino turístico, ubicado en la provincia de Talara, completamente paralizado. Según Jhon Ruiz Olaya, representante de la Asociación de Paseo Turístico de El Ñuro, la situación no solo afecta a las familias locales, sino que también pone en jaque al sector turístico regional en plena temporada de verano.
"Esperábamos más turistas en esta temporada, pero ahora no hay nado con tortugas ni paseos en yate", declaró Ruiz Olaya con preocupación. Además, aseguró que el colapso de las estructuras y las condiciones del mar dificultan cualquier intento de reconstrucción inmediata. Este panorama, señaló, podría extenderse por semanas, agravando aún más la crisis económica en la zona.
Por su parte, las autoridades marítimas han solicitado a los visitantes evitar ingresar al mar para preservar su seguridad. César Álamo, jefe del Distrito de Capitanías N°1, advirtió que el oleaje persiste en niveles peligrosos y aseguró que se mantendrán las señales de advertencia hasta que las condiciones mejoren.
El impacto también ha golpeado al sector pesquero. Más de 400 pescadores artesanales han detenido sus actividades, ya que sus embarcaciones y el muelle resultaron dañados por el oleaje. "Pedimos apoyo del Ejecutivo para obtener créditos que nos permitan afrontar esta crisis," señalaron representantes del gremio.
Con un turismo paralizado y una pesca artesanal detenida, El Ñuro enfrenta una situación crítica. Los afectados esperan que las autoridades prioricen la atención a esta emergencia para reactivar la economía local y mitigar las pérdidas.
