El 31 de diciembre, cuando quedan pocos minutos para las doce de la medianoche, toda España se paraliza frente a la televisión. La gran parte de los ciudadanos han contado ya varias veces las doce uvas de la suerte y el corazón comienza a latir cada vez más fuerte cuando se acercan las doce campanadas que nos indican que estamos en el momento en el que vamos a cambiar de año. La tradición de despedir el año comiendo estas doce uvas se inició a comienzos del siglo XX y desde entonces se ha convertido en un clásico en la mayoría de los hogares españoles. Hay muchas teorías a la hora de determinar la razón del comienzo de este hábito, pero la más extendida es que se inició después de una cosecha muy destacada de este fruto cuyo cultivo está tan extendido en España . Hay una localidad en la provincia de Huelva, como es el caso de Lepe, que desde el año 2006 se toma las uvas dos veces, aunque realmente no es del todo exacto, ya que lo que ocurre en Lepe es que hay un día antes del 31 de diciembre en el que se toman las denominadas 'Berries de la Suerte' . En el término municipal de esta localidad onubense existen algunas de las mejores explotaciones agrícolas de frutos rojos de toda Europa . Lepe es famosa en todo el mundo por el cultivo de moras, arándanos, frambuesas y fresas, razón por la cual hace casi dos décadas se instauró esta tradición que ha arraigado con fuerza en la población. Una acción que se diseñó con el objetivo de promocionar este producto y en el que participan productores y asociaciones locales. Cada año, se reparten más de un millar de pequeñas tarrinas en las que se encuentran estos frutos rojos que sirven para celebrar el final del año de una manera anticipada. La empresa Plus Berries , con la colaboración del Ayuntamiento de Lepe es la encargada de poner en marcha esta curiosa actividad, que en este 2024 va a tener lugar el 28 de diciembre a partir de las 18.00 horas, en la calle Real. Para darle mayor importancia y diversión al evento, habrá también música en directo , degustaciones de cócteles y todo ello para que haya un ambiente inmejorable que sirva para el disfrute de todos los asistentes. De esta manera, además del clásico 31 de diciembre, en el que las uvas son las auténticas protagonistas, este rincón del sur de España también cobra protagonismo en días previos a la Nochevieja, poniendo en marcha una curiosa tradición que sirve además para fomentar el consumo de un producto de la tierra que es muy importante para la economía local. Una curiosa tradición que puede servir también para que las personas que así lo deseen conozcan Lepe, una localidad con muchos encantos y que se encuentra muy cerca de espacios naturales de mucho interés.
