Las ZBE (Zonas de Bajas Emisiones) han entrado en el vocabulario de muchos ciudadanos desde que hace una década se empezaron a pensar y a plantear. Estos entornos urbanos nacieron como un espacio en la que están restringidos los vehículos más contaminantes , algo que en España determina la etiqueta ambiental que otorga la Dirección General de Tráfico (DGT) a los nuevos matriculados. Los impulsores de la iniciativa defienden que estas restricciones contribuyen a la mejora de la calidad del aire y son un gran elemento en la lucha contra el cambio climático y la contaminación acústica y ambiental en las ciudades. Sin embargo, a la práctica, son un duro revés para quienes, por un motivo u otro, tienen un vehículo no actualizado a las normativas de emisiones. De hecho, hay quienes utilizan su coche a diario para ir a trabajar o a estudiar y temen que llegue el momento en que sus vehículos puedan ser vetados. Por este motivo, durante años se ha estado debatiendo cuándo entrarían en vigor las restricciones y Barcelona y su área metropolitana era una de las zonas más avanzadas en la materia. Este mismo año, la Generalitat dio un paso adelante y anunció cuándo empezarían a quedar prohibidos los coches con etiqueta B , la más popular en el parque móvil actual. En concreto, el Govern aprobó el pasado verano, vía decreto, el 'Plan de calidad del aire, horizonte 2027' , con 84 medidas y 386 actuaciones para mejorar la calidad del aire, y así la salud de las personas. Entre ellas resaltan las políticas para reducir las emisiones contaminantes, en parte con medidas sobre el transporte motorizado, y por ello un papel clave lo tienen las ZBE, que están emplazadas en municipios con más de 50.000 habitantes. Así, se establecieron nuevas regulaciones de estas zonas y se confirmó que los vehículos con el distintivo amarillo (la etiqueta ambiental B) tendrán un veto en las ZBE a partir de enero de 2026 , eso sí, en un primer momento en días puntuales en los que estén decretados los avisos de altos niveles de contaminación. Estas jornadas suelen ser excepcionales en la actualidad y ocurren en contadas ocasiones a lo largo del año. La medida pasará a ser ya habitual, y no solo en días con alta polución, a partir de enero de 2028 . Si no hay cambios, a partir del 3 de enero de 2028 (puesto que el 1 y 2 caerán en fin de semana) los vehículos con etiqueta B no podrán entrar a las ZBE. Además, la Generalitat también incluyó en el Plan del pasado verano una medida añadida para que toda población con más de 20.000 habitantes tengan desde 2026 un veto total a la circulación de todos los vehículos que carezcan de una etiqueta ambiental. Allí, en 2028 también quedarán prohibidos todos los que vayan con etiqueta B.
