Los servicios de investigación surcoreanos han anunciado este lunes que buscan una orden de arresto contra el expresidente destituido Yoon Suk-yeol por negarse a ser interrogado sobre su fallida imposición de una ley marcial. «El Cuartel Conjunto de Investigación presentó una solicitud de arresto para el presidente Yoon Suk-yeol ante la Corte del Distrito Oeste de Seúl«, indicó el equipo investigador en un comunicado. Yoon se negó el domingo, por tercera vez, a presentarse a un interrogatorio, por lo que los servicios de investigación han acordado la solicitud. Yoon declaró ley marcial el 3 de diciembre, una acción que hundió a Corea del Sur en su peor crisis política en décadas. El líder conservador fue depuesto por el Parlamento el 14 de diciembre y se encuentra suspendido de sus funciones a espera de que la Corte Constitucional decida si valida o no la decisión de los diputados, y tiene prohibido salir del país . La crisis se agravó la semana pasada cuando su sustituto interino, Han Duck-soo, también fue destituido por los legisladores por negarse a firmar leyes para abrir investigaciones contra Yoon. El mandatario depuesto enfrenta cargos penales por insurrección que podrían acarrearle una sentencia de cadena perpetua o incluso la pena de muerte. Un informe de la fiscalía visto por la AFP indica que Yoon autorizó a las fuerzas armadas a disparar sus armas si lo necesitaban para ingresar a la sede del Parlamento el día en que promulgó la fallida ley marcial.