En España, la rivalidad entre Madrid y Barcelona se extiende más allá del fútbol o la política; se refleja también en su proyección internacional. Durante décadas, Barcelona se consolidó como el principal destino turístico del país, atrayendo a millones con su arquitectura modernista y sus playas. Sin embargo, Madrid ha invertido considerablemente en el sector del ocio y la hostelería, logrando posicionarse como una alternativa igual de atractiva. Hoy en día, la capital española no solo compite con Barcelona en este terreno, sino que en algunos aspectos la supera , según las experiencias de algunos visitantes. Así lo destaca el creador de contenido chino conocido como @jiajunyin3 en TikTok, quien asegura que Madrid tiene un carácter muy distinto al de la capital catalana. Aunque admite haber estado pocas veces, asegura que en su última visita descubrió la diferencia principal, que no es otra que la energía y el dinamismo de la ciudad. El tiktoker subraya que una de las mayores diferencias entre ambas ciudades se percibe de noche. Para él, la vida nocturna madrileña es mucho más animada que la de Barcelona. «La noche en Madrid es mucho más alegre que en Barcelona», explica, atribuyendo esto a la luminosidad y la actividad constante en las calles. En particular, compara la Gran Vía con Plaza Cataluña y concluye que la primera es claramente superior: «En Madrid hay mucha gente paseando, disfrutando de la calle. En Barcelona, la calle no es tan ancha ni luminosa. Barcelona parece más pueblo», asegura. A pesar de que Barcelona le resulta encantadora, el creador percibe un ambiente más sombrío en esta ciudad cuando cae la noche. En contraste, describe a Madrid como un lugar lleno de vida y con una atmósfera más acogedora. Otro aspecto que resalta es la interacción con la gente local, que considera una parte fundamental de la experiencia en cada ciudad. Según él, la actitud de los madrileños marca una clara diferencia. «Los madrileños son más simpáticos. Son más de tú a tú, más de 'hey, ya'. En Barcelona, la gente es más fría», comenta, destacando la calidez humana que ha sentido en Madrid.